Cd. de México.- La colocación de deuda internacional por 12 mil millones de dólares en Notas Estructuradas Pre Capitalizadas (P-Caps) para ayudar a Pemex aumentará "muy peligrosamente" la deuda de México a 60 por ciento del PIB en 2030, un nivel con el que los países pierden el grado de inversión, advirtió el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Victor Manuel Herrera, presidente del comité de estudios económicos del IMEF, explicó que, aunque la deuda por 12 mil millones de pesos en P-Caps no se registra como deuda de Pemex y tampoco como deuda de la Secretaría de Hacienda, sí se considera deuda pública.
El problema es que si Pemex no genera suficiente efectivo de aquí al 2030, lo cual es altamente probable, el inversionista va a recibir un bono del Gobierno federal en 2030 y esta operación la tendrá que emitir Hacienda. "Eso aumentará el apalancamiento del País, hoy estamos en 52-53 por ciento de deuda PIB; con este tipo de notas, más las necesidades naturales, nos acercaremos muy peligrosamente en 2030 al 60 por ciento deuda PIB y es que en ese nivel los países empiezan a perder el grado de inversión."Hay muy pocos países que logran mantener una deuda PIB de 60 por ciento y tienen grado de inversión, uno de ellos es India, pero ya cuando llegas a ese nivel las calificadoras consideran que ya no eres grado de inversión y caer en un grado especulativo de BB+ para abajo sí es un tema de mucho peligro. Es algo que México debería evitar", aseveró Herrera en la conferencia mensual del IMEF.
Hay dos razones financieras claves que son la deuda-PIB y gastos financieros a ingresos propios del Gobierno donde México ha estado "en la rayita" en 15 por ciento, pero la del 60 por ciento deuda-PIB es muy importante para no perder el grado de inversión, añadió el experto. Además, resaltó que los recientes programas de apoyo para Pemex en realidad son un rescate bastante oneroso. "Con esto van a ser 150 mil millones de dólares que recibe Pemex (pero) lo que es bueno para Pemex va a ser malo para el soberano; las calificaciones de Pemex ya tienen menos presión porque ya hay quien lo rescate con este tipo de emisiones. "El problema es que el que rescate va a tener que endeudarse para poder hacerle frente a esos vencimientos entonces sí es bueno para Pemex este programa, le quita presión financiera, pero es malo para el soberano porque a final de cuentas en el 2030 vamos a tener más deuda", remató.Advierten mayor costo fiscal de rescate
El desabasto de combustible, es una señal más de la situación financiera de la petrolera elevará el costo fiscal de rescate de la empresa, advirtió el IMEF. "La semana pasada hubo desabasto en el surtido de combustible porque Pemex no ha pagado a los proveedores de servicio de logística de pipas, afectando a usuarios industriales y particulares por igual. "Esta es una señal más de la situación financiera crítica de Pemex que empieza a afectar negativamente la marcha de la economía en su conjunto y que seguramente elevará el costo fiscal de rescate de la empresa, el cual se está aproximando a 150 mil millones de dólares, incluyendo la emisión de P-Caps reciente y la necesidad de refinanciamiento de 2026", dijo Gabriela Gutiérrez, presidenta del consejo ejecutivo nacional del IMEF. Añadió que la falta de generación de efectivo proveniente de la operación de la compañía, refuerza el argumento de que debe darse un cambio de estrategia para favorecer las líneas de negocio que generen flujo positivo como la extracción y venta de petróleo. "Pensamos que Pemex debe evaluar seriamente el fracking como alternativa para aumentar su generación de efectivo. Ofrecer energía suficiente y a precios competitivos es necesario para estimular la inversión", expuso. Por su parte, Victor Manuel Herrera, presidente del comité de estudios económicos del IMEF, recalcó que Pemex necesita una profunda reestructuración. "El Gobierno está ayudando con la emisión de P-Caps, faltan también los vencimientos del año que entra porque en su conjunto los 18 meses siguientes Pemex tiene vencimientos por 33 mil millones de dólares sin tomar en cuenta los adeudos a los proveedores y ya vimos también que dejaron de pagar a los proveedores de pipas. "Entonces, sí es una situación muy complicada, se tiene que hacer un cambio de estrategia. Pemex es bueno sacando petróleo y vendiéndolo; no es bueno refinando, no ha ganado dinero refinando petróleo desde 1993 y uno se pregunta por qué insistimos en refinar cuando no somos buenos para hacerlo y se pierde dinero. En promedio, anualmente se pierden entre 10 mil y hasta el año pasado, 30 mil millones de dólares", dimensionó.