Chihuahua.- Al bajo crecimiento económico de México se sumó en el último mes un alza en los precios del gas natural que impacta negativamente a la economía y genera presiones inflacionarias, dada la fuerte dependencia de este insumo para la generación eléctrica y la industria, sostuvo Miguel Nájera Villegas, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

Expuso el representante de los ejecutivos de finanzas que la baja producción interna obliga al país a importar la mayor parte del gas natural de Estados Unidos.

Explicó que las bajas temperaturas registradas en el país del norte han elevado el precio del energético que escaló de 2 por BTU (medida de volumen usualmente utilizada para el gas natural) en septiembre pasado a 5.29 dólares por BTU en noviembre y actualmente está en 4.10 dólares por BTU, pero todavía más del doble que hace un año.

México importa 2.5 billones de pies cúbicos de gas al año de Estados Unidos, 48 por ciento más que en 2018. La falta de infraestructura de almacenamiento hace al país vulnerable a las alzas súbitas del precio del gas y a periodos de escasez por climas fríos como ocurrió en 2022. Mencionó Nájera Villegas que el incremento es relevante, pues impulsa la inflación y eleva los costos para la industria y la generación de energía.

Recordó que existía un proyecto para almacenar gas natural que en la pasada administración no fue aprobado, lo que ha generado estas consecuencias. Actualmente, dijo, existen voces en el Gobierno que proponen la extracción de gas natural; sin embargo, consideró que esto sería un grave error, pues tal como ocurre con la refinación de gasolina, no es un negocio rentable.

“No somos eficientes extrayendo ni refinando y los costos resultan altísimo”, afirmó.

Agregó que la práctica del fracking para extraer gas daña el medio ambiente y si bien lo hace Estados Unidos, no es una buena idea para México.

Indicó que la decisión inteligente es invertir en una infraestructura de almacenamiento, para próximos periodos.