Los movimientos realizados al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) número 3, luego de la riña registrada el domingo 4 de agosto, permitieron tapar “hoyos” por los que se “colaban” droga y artículos restringidos enviados a las personas privadas de la libertad (ppl), informó personal de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE).
Eso obligó a los traficantes a tener que abandonar 760 dosis de droga y otros objetos que buscaban introducir ocultos o mediante pago, y abandonarlos en el exterior del penal donde fueron asegurados poco después del traslado de 76 internos.Por el tipo de opioide incautado se presume que esas dosis tenían como destino el área controlada por los integrantes de las pandillas “La Línea” y “La Empresa”, es decir, el Área 3.
Y aunque no es una cantidad extraordinaria, es una muestra de que el penal aún no está blindado, explicaron autoridades penitenciarias. El Cereso 3 registra hacinamiento al albergar a más de 4 mil internos, lo que trajo como resultado la circulación de droga dentro del penal, así como también la introducción de artículos por parte de las visitas a través de la seguridad controlada por los custodios. Luego del enfrentamiento entre integrantes de dos pandillas, “Paisanos” y “Chapos”, 76 reclusos fueron trasladados a cárceles estatales. Además, los custodios fueron rotados y las medidas de seguridad al interior fueron modificadas. Autoridades carcelarias expusieron que están cerradas las puertas para privilegios, aunque algunos presos logran encontrar recovecos. Luego de la riña que dejó un saldo de siete lesionados, se realizó un cateo y luego el traslado de reos. Durante el cateo fueron aseguradas armas “hechizas”, además de objetos que estaban prohibidos dentro de las celdas. Mientras se reorganizaba la visita, la seguridad exterior detectó una mochila negra dentro de un contenedor de basura, la cual desentonaba con el resto de los artículos, por lo que se procedió a la revisión. En el interior de la misma, se localizó un envoltorio plástico que contenía 160 envoltorios individuales con presunta droga con las características de la cocaína. Tras estos hechos, se procedió a revisar el resto de los contenedores en el perímetro, localizando en uno, una bolsa plástica en cuyo interior había diversos artículos electrónicos funcionales como memorias USB, un teléfono celular, un módem, cables de carga y audífonos, así como cigarros electrónicos, diversos audífonos y una máquina ‘hechiza’ para tatuar. El domingo, nuevamente los vigilantes aseguraron 600 dosis de presunta heroína afuera del Centro de Readaptación Social (Cereso) número 3. La sustancia estaba envuelta en una toalla, al interior de los contenedores de basura. Tras estos hechos, se procedió a revisar el resto de los contenedores, sin encontrar más material sospechoso. lsosa@redaccion.diario.com.mx