Aunque existe una recompensa de 200 mil pesos a quien proporcione información sobre el paradero de Fernanda Anahís Molina Vásquez, la mujer de 18 años permanece en calidad de desaparecida, sin embargo, los avances en las investigaciones que realiza la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género y a la Familia (FEM), indican una ausencia voluntaria.

No sólo de ella, también de su pareja sentimental, Ulises Isac Pecina González, también de 18 años y ausente desde el mismo día que Anahís, el 9 de julio.

“La información periférica que tenemos establece que Fernanda tomó una decisión de marcharse de manera voluntaria al sentirse forzada, por su propia familia, a salir de la ciudad para concluir su relación sentimental”, explicó un investigador que dijo no estar autorizado para dar entrevistas. 

Explicó que los avances de las investigaciones los conoce la familia. El Diario buscó una entrevista con Perla Vásquez, madre de Fernanda Anahís, sin resultados positivos. 

Como se informó, la mujer de 18 años presuntamente viajó desde esta ciudad hasta Saucillo, Chihuahua, donde presentaría un examen para ingresar a la Escuela Normal Rural Ricardo Flores Magón.

Sin embargo, la joven rompió contacto con su madre, mientras que Ulises Isac, también originario de esta ciudad, se salió de su casa y hasta el momento la familia desconoce su paradero. 

Los investigadores explicaron que Fernanda no quiere ser localizada, sin embargo, es deber de la autoridad localizarla.

No pueden ser forzados a regresar

Explicaron que en caso de que ambas personas sean localizadas deben comparecer de manera voluntaria ante el Ministerio Público para rendir su declaración y de no existir delito qué perseguir que atente contra ambos, como una retención ilegal o privación ilegal de la libertad, pueden cerrar la carpeta de investigación.

También destacaron que debido a que ambos son mayores de edad no pueden ser forzados a regresar con sus respectivos padres. Incluso ofrecen apoyo psicológico para que ambos puedan reestablecer la comunicación con sus núcleos familiares y evitar que se coloquen en una situación de riesgo por huir de sus hogares.