Roberto Isaac A. A., el segundo detenido empleado de la funeraria Del Carmen, fue liberado luego de que previo a su comparecencia ante un juez de Control saliera a la luz que se encontraba amparado contra su captura por el juez Noveno de Distrito, José Armando Zozaya Solórzano.
El hombre es identificado como quien ofreció los servicios funerarios a la familia de José María I. M., como quien les aseguró que podría llevarse la cremación (pese a que el difunto era víctima de homicidio doloso) y como quien recogió el cuerpo en el Servicio Médico Forense el pasado 2 de junio, con la funeraria suspendida por la Coespris ante la desatención, desde octubre de 2024, a las irregularidades observadas. El pasado sábado le fue ejecutada una orden de aprehensión por delitos similares al primer detenido de ese recinto, Miguel Ángel A. O., que son ocultamiento y conservación ilegal de cadáveres, sumado a fraude y falsificación de documentos públicos. Sin embargo, ayer domingo el mandato judicial bajo la causa penal 3747/2025 fue anulado debido a un amparo ante el juzgado Noveno de Distrito tramitado por Roberto Isaac A. A., pero cuya resolución no fue informada sino hasta pasado el mediodía, cuando ya se esperaba la audiencia inicial en su contra. La Fiscalía de Distrito Zona Norte detuvo a Roberto Isaac, y buscaba la aprehensión de Nancy Iveth A. A., por la misma causa penal, pero ella tenía en ese momento la protección federal por un amparo tramitado días antes en contra de órdenes de captura. La mujer estuvo señalada durante la audiencia de Miguel Ángel A. O. por él mismo como la encargada de ‘hacer ese negocio’, del contrato para la cremación de José María I. M., además de que se le mencionó como una de las dos personas testigos de la visita del 12 de julio de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, pero que, de acuerdo con el visitador de la dependencia, no pudo firmar el acta resultante del recorrido de verificación porque ‘se sintió mal’ y se fue. Además, durante las horas de valoración para detener en flagrancia a Miguel Ángel A. O., llegó un hombre llamado Enrique Valenzuela a entregar documentos que buscaban la liberación del hombre. Valenzuela dijo ser abogado del recinto funerario, pero luego se retractó y acusó a Nancy Iveth de ser quien lo envió a entregar los documentos. Roberto Isaac A. A. y Nancy Iveth A. A. se encuentran, entonces, en libertad, sin posibilidad de ser detenidos por la causa penal. No obstante, como parte de las condiciones para sostener la suspensión provisional que le permite no ser capturado, Roberto Isaac accedió frente al juez de Garantía Jorge Enrique González Rodríguez a comparecer de manera voluntaria esta semana, para escuchar la formulación en su contra. De acuerdo con personal del Ministerio Público de la Fiscalía, las investigaciones continuarán para poder realizar las diligencias que permitan llevar justicia a las víctimas.dvilla@redaccion.diario.com.mx