Washington DC, Estados Unidos.- Las banderas nacionales están a media asta este lunes en Estados Unidos, un día después de la muerte a los 100 años de Jimmy Carter, un ex Presidente cuyo mandato fue marcado por fracasos pero cuya vida política como pacificador y filántropo fue unánimemente elogiada.
Joe Biden declaró día de luto nacional el 9 de enero en honor a quien dirigiera el país entre 1977 e 1981, y ordenó que las banderas estadounidenses ondeen a media asta durante un mes, un periodo durante el cual Donald Trump asumirá la presidencia del país.
El Mandatario demócrata llamó a "todos aquellos que buscan saber qué significa vivir una vida que tiene propósito y significado" a estudiar la de Jimmy Carter, "un hombre de principios, fe y humildad". Las autoridades a cargo del funeral de Estado del ex Presidente aún no han informado sobre el calendario de actos. Según el New York Times, el 9 de enero se celebrará una ceremonia en la Catedral Nacional de Washington en la que Biden pronunciará una oración.Lucha por la paz
Los ex Presidentes estadounidenses vivos le rindieron homenaje: Barack Obama lo saludó como una persona "extraordinaria", George W. Bush como un "hombre de profundas convicciones", mientras que para Bill y Hillary Clinton, Jimmy Carter "trabajó incansablemente por un mundo mejor y más justo". "Aunque estaba profundamente en desacuerdo con él filosófica y políticamente, también me di cuenta de que realmente amaba y respetaba a nuestro país", dijo Trump ayer en su plataforma Truth Social, quien en el pasado había criticado con vehemencia al ex Presidente. Los elogios a la figura de Carter también fueron a nivel internacional. El Papa Francisco destacó el compromiso de Carter con la paz, "motivado por una profunda fe cristiana", mientras el Presidente francés, Emmanuel Macron, el Rey Carlos III y el jefe de Estado brasileño, Luis Inácio Lula da Silva, subrayaron el compromiso del fallecido Mandatario demócrata con la defensa de los derechos humanos. El Centro Carter, la fundación del ex Presidente, anunció el domingo que el Premio Nobel de la Paz de 2002 murió "en paz" el mismo día en su casa de Plains, Georgia, "rodeado de su familia". Carter era originario de ese estado del sureste de Estados Unidos, donde creció en la granja de maní de sus padres, una finca de la que se hizo cargo cuando dejó la Marina y antes de entrar en política. Su esposa y fiel compañera Rosalynn falleció el año pasado a la edad de 96 años y fue enterrada en Llanos, luego de un homenaje nacional. Con el rostro demacrado, Jimmy Carter participó en los funerales, en una de sus raras apariciones públicas de los últimos años. Se espera que el ex Presidente sea enterrado junto a Rosalynn tras las ceremonias previstas en Washington y Atlanta, capital de Georgia.