Nueva York.- Debido a que los demócratas confrontan una carrera presidencial contra un resiliente Donald J. Trump que ha logrado resurgir, así como también su brutal desafío al mapa del Senado, consideran que tienen un arma política cada vez más poderosa: las medidas que aparecerán en la boleta para proteger el derecho al aborto.
Se espera que dos estados cruciales para la presidencia y el Senado, Arizona y Nevada, van a colocar esas medidas directamente ante los votantes.
Al igual que otros estados que tienen importantes competencias al Senado, incluyendo Maryland y posiblemente Montana.
Las medidas sobre el derecho al aborto podrían aparecer en las boletas en estados como Nueva York, Florida y Nebraska, en donde una reñida competencia podría determinar si los demócratas ganan de nuevo la Cámara.
Los esperanzados demócratas y preocupados republicanos, están totalmente conscientes de que en los siete estados en donde el aborto se ha puesto directamente a consideración de los votantes desde que la Suprema Corte anuló el caso Roe contra Wade, el derecho al aborto ha ganado, tanto en estados republicanos como Ohio y Kansas y en estados indecisos como Michigan.
Esas medidas en algunas ocasiones también han impulsado una gran asistencia a las urnas de liberales que les han dado la victoria a los demócratas.
Así que, en cada estado en donde la medida del aborto ya está en la boleta del 2024 o podría aparecer en ella, los candidatos demócratas, partidos estatales y grupos aliados están haciendo una campaña frenética junto con las iniciativas en las boletas, publicando anuncios, apoyando con dinero y mencionando esas medidas en discurso tras discurso.
En Arizona, en donde los demócratas están tratando de cambiar la Legislatura, los candidatos del partido han ido más allá y han recabado firmas para que aparezca la medida en las boletas, tocando a las puertas de los votantes.
Debido a que los sondeos muestran que la mayoría de los estadounidenses piensan que el aborto deber ser legal en todos o en la mayoría de los casos, las medidas podrían servir como un salvavidas político en un momento en que el presidente Biden enfrenta una obstinada y baja aprobación y escepticismo dentro de su partido.
Los demócratas esperan que esa iniciativa aumente la asistencia a las urnas de votantes como mujeres de los suburbios, jóvenes y afroamericanas.