Cuilco, Guatemala.- Cientos de chiapanecos que cruzaron la frontera arribaron a cuatro comunidades del Municipio de Cuilco en una situación emocional crítica.
“Llegaron con crisis nerviosa, miedo y el azúcar elevado, y casi no quieren hablar”, dijo una mujer encargada de uno de los albergues de Ampliación Nueva Reforma.El departamento de Huehuetenango ha recibido a los chiapanecos que huyen de la violencia en la Sierra de Chiapas por la pugna entre los Cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.
Los refugiados aseguran que los cárteles los obligan a unírseles, por lo que prefieren huir de México.
En Ampliación Nueva Reforma se han instalado tres albergues: en una escuela primaria, en una iglesia católica y en una cristiana.
En el resto de las localidades guatemaltecas –“Oaxaqueño”, Monterrico y Nueva Frontera– se ha abierto un albergue en cada una de ellas.
“Hoy sale un carro de víveres que viene de Guatemala capital y va a Ampliación Nueva Reforma”, informó Juan Francisco Méndez consejal de Cuilco. Hay decenas de niños y niñas en estos refugios. Algunos de los menores presentan alguna discapacidad y fracturas en sus pies. Una mujer guatemalteca que llevó comida a los albergues reveló: “Las personas dicen que su gobierno no hace nada”.Prevén aumente cifra de refugiados
Desplazados mexicanos a Guatemala advirtieron a autoridades de ese país que derivado de las persecuciones de las que son blanco en sus comunidades, van a llegar más chiapanecos a los albergues, dijo ayer Aldo Waykán, comisionado y asesor de asuntos migratorios del Gobierno de Bernardo Arévalo.
“Fuimos a visitar una de las comunidades donde se están albergando temporalmente la población mexicana (...) nos compartían los ciudadanos mexicanos que piensan que van a seguir llegando personas a Guatemala por las persecuciones que en este momento están sintiendo en México”, alertó el funcionario guatemalteco en conferencia.Por ahora, dijo, el interés de los mexicanos desplazados es tener un refugio en ese país de manera regular.
Añadió que será instalado un albergue más formal en Cuilco, debido a que el refugio de Ampliación Nueva Reforma está alejado para el suministro de víveres. “Ya hay algunas indicaciones, de qué tipo de protección se les puede brindar a las personas de México, alguna de las situaciones o condiciones que pude ver son las condiciones de vida, el albergue no se presta para un albergue formal, por lo tanto, el día de hoy tenemos una reunión con las instituciones y ya hay ciertas coordinaciones.“Lo que tenemos entendido el día de hoy (ayer) es de que el municipio de Cuilco será la sede de uno de los albergues para poder trasladar a las personas hacia el lugar, porque es muy difícil acceder hasta donde están”, reiteró.
Reconoció que una de las preocupaciones que tienen las autoridades guatemaltecas es la atención permanente a los mexicanos refugiados y confirmaron que el Gobierno de México no ha enviado apoyo para los connacionales.
En cuatro comunidades de Cuilco hay cientos de chiapanecos de la Sierra que prefirieron dejar su hogar, bienes y animales antes de someterse a los cárteles y en otros casos, las personas fueron desalojadas por los criminales.
“La gente dice que salió porque el cártel los obligó a pertenecer, luego los sacaron de su casa, así, en chanclas, y cuando la gente corría aventaron una bomba a la casa y posteriormente les enviaron un video”, dijo a Reforma, una mujer en uno de los albergues de Ampliación Nueva Reforma donde se instalaron albergues en una escuela primaria, una iglesia católica y en un templo cristiano.