Teherán, Irán.- El Ejército de Israel dijo este sábado que atacó una instalación de investigación nuclear iraní durante la noche y mató a tres comandantes de alto rango en operaciones dirigidas, al tiempo que subrayó que se estaba preparando para la posibilidad de que la guerra se convirtiera en una larga campaña.
A primera hora de este sábado, tiempo local, se pudo ver humo saliendo de una zona cercana a una montaña en Isfahán, donde un funcionario local dijo que Israel había atacado la instalación de investigación nuclear en dos oleadas.
El objetivo eran dos sitios de producción de centrifugadoras, y los ataques se sumaron a la campaña de los últimos días contra plantas similares ubicadas en otros lugares, según un oficial militar israelí que habló bajo condición de anonimato en cumplimiento con las normas del Ejército para informar a periodistas. Se trata del segundo ataque registrado en Isfahán, que fue golpeado en las primeras 24 horas de la guerra como parte del objetivo de Israel de destruir el programa nuclear iraní.Akbar Salehi, Vicegobernador de la provincia de Isfahán para asuntos de seguridad, confirmó que los ataques israelíes habían causado daños en la instalación y apuntó que no había víctimas.
Irán lanzó una nueva oleada de drones y misiles contra Israel, pero no se reportaron daños significativos de inmediato, y el funcionario israelí la calificó como una "pequeña andanada" que fue en gran medida interceptada por las defensas antiaéreas. De acuerdo con el funcionario, parte de la razón por la que el ataque nocturno de la República Islámica había sido relativamente pequeño era porque Israel ha estado atacando sus lanzadores y estima que ha eliminado más del 50%. "Hemos podido eliminar una gran cantidad de sus lanzadores, creando un cuello de botella. Estamos dificultando que disparen hacia Israel", aseveró. "Dicho esto, quiero decir que el régimen iraní obviamente todavía tiene capacidades". El servicio de rescatistas israelí Magen David Adom indicó el sábado que un avión no tripulado iraní golpeó un edificio de dos pisos en el norte de Israel, pero no causó víctimas. Más tarde, el principal portavoz militar de Israel, el General de brigada Effie Defrin, dijo que el jefe de Estado Mayor, el teniente general Eyal Zamir, ordenó al Ejército que se prepare para una "campaña prolongada" para destruir sus objetivos, incluyendo sitios nucleares, instalaciones de enriquecimiento e infraestructura de misiles. "Estamos intensificando nuestros ataques noche tras noche y hemos logrado resultados sorprendentes", añadió. "Continuaremos hasta que la amenaza sea eliminada".