Chihuahua, Chih.- En el mejor de los escenarios, la apertura de la frontera de Estados Unidos al ganado mexicano podría darse en 15 ó 20 días; de no avanzar el tema, el cierre podría extenderse hasta la temporada de frío cuando no hay presencia de la mosca que propaga el gusano barrenador, sostuvo Álvaro Bustillos Fuentes, presidente de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua (UGRCh).

El representante de los ganaderos señaló que el pasado lunes sostuvo una conversión con Gabriel Ayala, del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), quien le informó que durante la semana analizarán los reportes que realizó del sureste del país una misión técnica del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), sobre las acciones para combatir el gusano barrenador, en los que se esperan resultados positivos.

Mencionó que de ampliarse el cierre de la frontera hasta la llegada del invierno representaría un daño catastrófico para el sector, “ya más no podemos aguantar. No podemos perder la esperanza, tenemos que seguir picando piedra”, dijo.

Expuso que la mosca Cochliomyia hominivorax, conocida como mosca del gusano barrenador, avanza 27 kilómetros diariamente, por lo que es necesario estar atentos en la movilidad del ganado, pues no hay el interés de algunos participantes de la industria en trabajar por el bien de la sanidad del país.

Indicó que los estados exportadores de ganado trabajan contracorriente, pues hay otras 27 entidades que no les interesa la exportación, “entonces nosotros tenemos que ver por nuestros intereses y blindar a Chihuahua”, dijo.

Por ello, recordó, se ha planteado como estrategia la regionalización, el dividir el país en diferentes frentes para instalar puntos de revisión.

“Hoy por hoy, si a Chihuahua le toca pedir lo mismo que nos piden los norteamericanos lo vamos a hacer. Entonces vamos a pedir al ganado en tránsito su aplicación de ivermectina, vamos a inspeccionar y a bañar el ganado y el que venga con heridas va para atrás”, subrayó.

Apuntó que ha sostenido pláticas con la Gobernadora en las que se analiza cabildear en Estados Unidos con los congresistas Ronny Jackson y Tony Gonzales, quien forma de la comisión de USDA, y con directores y participantes de la industria, pues es importante impulsar la apertura de la frontera a la exportación de ganado desde Estados Unidos

Mencionó que tanto es el interés de los ganaderos mexicanos de exportar como de los productores norteamericanos de recibir el ganado, por lo que son un gran aliado.

Explicó que los ganaderos en el país vecino atraviesan por el punto más bajo en el volumen de inventario de sus engordas de los últimos 74 años, por lo que han pedido a la titular de USDA, Brooke Rollins, que se abra la frontera pues de no hacerlo, puede ser que empiecen a perder hasta empacadoras, “de ese tamaño es el reto de la industria”, dijo.

Reiteró que los estados exportadores de ganado están libres de la plaga del gusano barrenador y existe un protocolo que hay que hacer valer para poder seguir comercializando.

“Lo que nos está pasando es que estamos siendo una moneda de cambio, que usan para presionar a la autoridad mexicana para realizar las acciones que plantearon los norteamericanos”, sostuvo.

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