Chihuahua, Chih.- En el marco de la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres, el Gobierno Municipal reconoce la importancia y trascendencia que la labor de ellas representa en la actualidad, especialmente la que ejercen policías y bomberas, quienes por amor y vocación han optado por servir y proteger a su comunidad, arriesgando su propia vida para salvar las de sus semejantes.

Actualmente ser mujer es sinónimo de igualdad y equidad y no existe impedimento alguno para desempeñar funciones que anteriormente eran consideraras por la sociedad casi exclusivas del sexo masculino; sin embargo, gracias a la evolución de las leyes y normatividades encaminadas al bien común, esto ha quedado en un simple recuerdo del pasado.

Sus labores ya no son algo extraño ni fuera de lo ordinario, y observarlas en las calles o dependencias gubernamentales con sus uniformes y placas al pecho es una situación de orgullo por demás natural, pues cada día más ciudadanas deciden unirse a las filas de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) para combatir la delincuencia o salvar personas de incendios u otras situaciones.

Ejemplo de ello es la última generación de egresados de academia que graduó el alcalde Marco Bonilla, en la que el número de féminas que llegaron hasta el final del proceso superó al de varones. La agente Cristina Chávez Amarillas y la bombera Diana Robles coincidieron en que pertenecer a la DSPM las hace sentir orgullosas y capaces, como cualquier otra persona, sin importar su sexo, pues eso no les ha impedido en lo absoluto realizar sus actividades de la mejor manera.

Policía Cristina Chávez

“Pertenezco a la Policía Montada y orgullosamente soy la única policía de mi familia. Yo sí soñaba desde pequeña con estar donde estoy ahorita. El ser mujer me ha servido para que mis compañeros me apoyen y me apapachen; sin embargo al momento de actuar, entramos parejo. Todas las mujeres podemos lograr lo que nos propongamos, no hay impedimentos para este género”.

Bombera Diana Robles

“Soy también paramédico y recientemente me nació la vocación por convertirme en bombera; es un labor muy bonita y creo que como mujeres quizá tengamos que dar poquito más, pero no hay nada que no podamos hacer, cada quien tiene sus propias habilidades y capacidades para servir. Mis compañeros me tratan como a cualquier otra persona y para ellos no existe distinción alguna entre mujeres ni hombres. El hecho de ser mujer no significa no poder”.