El Infonavit, la Notaría 10 de Juárez y la Notaría 29 de Chihuahua, así como la empresa Inmobiliaria Casas Juárez, son señalados en una denuncia penal por fraude y usurpación de identidad en contra de un trabajador, quien fue despojado de una vivienda sin darse cuenta, la cual fue vendida unos meses después.
La denuncia responsabiliza al representante de la inmobiliaria juarense, Héctor Alejandro R.C., de haber actuado con la complicidad de personal del Infonavit para tener información de cuentas en impago, sin que las notarías revisaran a fondo la documentación presentada.
Apenas a finales del año pasado, la presidenta Claudia Sheinbaum y el director nacional del Infonavit, Octavio Romero, habían denunciado que, en todo el país, mil 400 viviendas habían sido vendidas 12 mil veces, mediante esquemas fraudulentos similares a este. En Ciudad Juárez, este es uno de diversos casos denunciados con prácticas que involucran el uso de información del Infonavit, áreas de Catastro Municipal, inmobiliarias y notarías, para revender de forma irregular viviendas pagadas a crédito y abandonadas, cuyos propietarios han caído en impago por cambiar de trabajo u otras causas.
El modo de operar implicaría además a elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE), dado que no han mostrado avances las querellas reportadas como en investigación.
La denuncia específica que revela un presunto modo de operar común -de acuerdo con el quejoso que presentó la querella con todos los elementos del fraude, cuyos datos pidió mantener bajo reserva- fue recibida por la Fiscalía Zona Norte, en la Unidad de Atención Temprana, el 6 de marzo de 2024, de acuerdo con el sello oficial de la dependencia, pero hasta la fecha no ha mostrado avances. Según la denuncia, cuya copia obra en poder de El Diario, la víctima acudió a presentar la querella formal contra Héctor Alejandro R. C., por los delitos de fraude y usurpación de identidad, tras enterarse que su casa aparecía en Catastro Municipal a nombre de otra persona, cuando acudió a verificar su adeudo del Impuesto Predial con el fin de ponerse al corriente en el pago.
Para que eso pasara, su identidad había sido alterada para que una notaría de la capital del estado le diera un poder al vendedor oficial de la casa; en otra notaría de Juárez había sido cancelada su hipoteca también con documentación irregular, después de que el Infonavit registrara un pago de liquidación del crédito que la víctima no hizo.
Perdió la casa sin darse cuenta
El 10 de enero del año pasado, la víctima acudió a buscar un estado de cuenta de su Impuesto Predial, por una propiedad ubicada en la calle Rivera de Tula, en el fraccionamiento Riberas del Bravo V Etapa, la cual estaba deshabitada.
Dicha vivienda había sido adquirida por el propietario legítimo con un crédito del Instituto del Fondo de Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), por un monto entonces fijado en veces el salario mínimo en junio de 2003, modalidad que el organismo canceló recientemente, dado que aumentaba de forma constante los pagos a los que eran obligados los acreditados.
Tras perder su trabajo en octubre de 2018, el propietario de la casa y beneficiario del crédito del Infonavit cayó en impago, sin poder regularizarlo porque batalló con el empleo durante años, agravándose su situación familiar y financiera con la pandemia del año 2020.
Del crédito total otorgado en 2003, hasta octubre de 2018 quedaron pendientes de saldar 142 mil pesos, financiados por la instancia federal y ya eliminada la modalidad de veces el salario mínimo, en que eran cotizados los préstamos anteriormente.
Ese fue el monto que dejó de pagar y la casa quedó en el abandono, razón por la que pretendía regularizar tanto el crédito del Infonavit como el adeudo del impuesto municipal, pero cuando solicitó el estado de cuenta con el domicilio y la correspondiente clave catastral, apareció la propiedad a nombre de Alejandra Pérez Ramos.
La víctima pensó que se trataba de una confusión o un error en el registro municipal, por lo que acudió a visitar su domicilio en Riberas del Bravo, encontrándose con la sorpresa de que ya estaba habitado por una familia y además con algunas partes en construcción.
Al indagar, se dio cuenta de que no era confusión en el registro ni que su vivienda, adquirida con el crédito que estaba en mora y que pensaba abandonada, hubiera sido invadida; había sido vendida por un particular a su nombre, sin que, obviamente, la víctima lo autorizara.
Primera involucrada, Inmobiliaria Casas Juárez
La empresa Inmobiliaria Casas Juárez, a través de una “asistente de redes sociales”, como se identificó, respondió en una llamada hecha por El Diario que no se encontraba Héctor Alejandro R. C., y negó cualquier forma de contacto con dicha persona, tras ser solicitada información sobre la denuncia en la que era mencionado.
Supuestamente, dejaría el mensaje para que el representante de la empresa dedicada a la compraventa de bienes inmuebles se comunicara para atender el requerimiento de información.
El negocio, según su publicidad en redes sociales, está ubicado en el cuarto piso, despacho 404, del edificio Baker & Mckenzie de la avenida Paseo Triunfo de la República, con el número de teléfono 656-762-3411 y el correo electrónico: icjnotarias@gmail.com. El teléfono dirige a un conmutador y del correo no se recibió respuesta a la solicitud de información.
En su página de Facebook, la última información publicada es del 19 de enero de este año, con un promocional del link al que se puede accesar al Infonavit para crear una cuenta, revisar los puntos y la solicitud de crédito, entre otros detalles.
La víctima acusa que quien asegura representar a la inmobiliaria ha estado vinculado a otros fraudes similares que han sido denunciados ante la Fiscalía General del Estado en la Zona Norte, sin embargo, no han procedido las querellas por múltiples pretextos que ponen quienes reciben las denuncias y deben encargarse de su investigación, los agentes del Ministerio Público.
Presumiblemente, Héctor Alejandro obtiene de forma indebida información de la oficina de Catastro Municipal y del Infonavit, para conocer los adeudos de Predial de casas abandonadas con créditos de la instancia federal, así como la condición de los empréstitos. Con la información obtenida, incluso datos particulares sensibles de las víctimas, presuntamente orquesta la suplantación de identidad, mediante la cual tramita un poder en las notarías a nombre de las personas de las que roba sus datos personales, con el que hace las transacciones de sus propiedades.
Para ello, el representante de la inmobiliaria invierte en pagar los adeudos de predial y los créditos, a nombre supuestamente de sus titulares, para luego recuperar su inversión y obtener ganancias con la venta de las casas, de lo que las víctimas no se dan cuenta hasta años después.
Notaría en Chihuahua dio poder a Héctor Alejandro
La denuncia presentada en marzo del año pasado establece que al revisar información del Registro Público de la Propiedad y del Notariado, la víctima se dio cuenta de que una persona a su nombre, con una credencial del INE falsificada, otorgó un “mandato y poder general para pleitos y cobranzas, actos de administración y de dominio”, a favor de Héctor Alejandro R.C., el 18 de agosto del año 2021.
El poder se limita a la propiedad de la calle Rivera de Tula en el fraccionamiento Riberas del Bravo de Ciudad Juárez, pero fue otorgado en la Notaría número 29 de la ciudad de Chihuahua, a cargo de Víctor Eugenio Anchondo Santos, ubicada en la avenida Juárez de la colonia Obrera.
La víctima desconoce la firma y la credencial utilizada con su nombre, pues incluso la fotografía que muestra es diferente a su rostro; asimismo, reclama que el poder general, pero limitado a su propiedad en la ciudad fronteriza, se haya realizado en una notaría de la capital, a unos meses de que el inmueble fuera vendido de forma irregular.
Para la persona afectada, el hecho de que se haya utilizado una credencial falsa, robándole su identidad, a pesar de que las notarías pueden revisar de forma exhaustiva la información y documentación que acercan quienes realizan trámites en ella, es evidencia de una actuación irregular del notario responsable.
Pese a que no desconoce que un notario puede formalizar un poder o mandato aplicable en otra ciudad, en su caso es sumamente extraño y sospechoso, que dicho trámite haya sido realizado en la capital, si el inmueble, el domicilio de persona que lo tramitó y la que se prestó para usurpar su identidad, todo corresponde a Juárez.
El notario Anchondo fue buscado vía telefónica y por el correo electrónico reportado al Registro Público de la Propiedad (notaria29chihuahua@gmail.com), pero no respondió a los cuestionamientos planteados en torno a la denuncia y el poder expedido con el sello y firma de su titular, cuya copia también obtuvo El Diario.
Notaría en Juárez avaló la compraventa
Otro documento que sustenta la denuncia es la escritura de la propiedad de Rivera de Tula, fechada el 4 de noviembre de 2021, es decir, dos meses y medio después de que la notaría de Chihuahua expidió el poder y mandato a favor del acusado.
El notario Carlos Alberto Acevedo Barraza, titular de la Notaría 10 de Juárez, fue quien registró la transacción que realizó Héctor Alejandro R.C., en supuesta representación de la víctima del fraude y usurpación de identidad.
El representante de Inmobiliaria Casas Juárez vendió la propiedad en 440 mil pesos a la señora Alejandra Pérez Ramos; para hacerlo, debió pagar el saldo del crédito del Infonavit y el Impuesto Predial para que quedara libre de gravamen y pudiera ser vendida, así como el arancel que cobran los notarios para la elaboración de un poder con el que se pueden hacer los trámites. Debido a que el saldo del crédito de la víctima había sido cubierto, el Infonavit canceló la hipoteca inicial, para lo cual dio su aval Daniel Jasso Castro, señalado como representante de la instancia federal ante la Notaría número 10.
Es decir, primero fue cancelada la hipoteca al registrar como pagado el saldo del crédito que había estado en mora desde octubre de 2018 y luego se procedió a formalizar el contrato de compraventa, en el que aparece como vendedor Héctor Alejandro R.C. a nombre de la víctima y como compradora otra persona, quien adquirió la vivienda sin conocer las irregularidades ahora denunciadas.
El notario Acevedo también fue buscando para conocer su postura en cuanto a la denuncia y los documentos que prueban los trámites realizados, pero telefónicamente el conmutador registrado como de ésta y de otra notaría no responde y no dio contestación de su correo electrónico, tomado de la base de datos del Registro Público de la Propiedad, (cacevedo@ecrubio.com).
La víctima lamenta que su denuncia no ha sido investigada por la Fiscalía Zona Norte, a pesar que le han informado otras personas de la misma dependencia, que Héctor Alejandro R.C. enfrenta más querellas, que tampoco han mostrado avances ni resultados favorales para las víctimas.
El negocio, según su publicidad en redes sociales, está ubicado en el cuarto piso, despacho 404, del edificio Baker & Mckenzie de la avenida Paseo Triunfo de la República, con el número de teléfono 656-762-3411 y el correo electrónico: icjnotarias@gmail.com. El teléfono dirige a un conmutador y del correo no se recibió respuesta a la solicitud de información