Emma Coronel Aispuro, esposa de Joaquín "El Chapo" Guzmán, aseguró sentir profunda empatía por las víctimas que han perdido a familiares a causa de la violencia ligada al narcotráfico, en una inusual aparición pública tras su salida de prisión.
En el documental "Married to 'El Chapo': Emma Coronel Speaks", la ex reina de belleza ofreció una disculpa a quienes han sufrido por las acciones del Cártel de Sinaloa.
"Me solidarizo con todas las personas que perdieron a un ser querido, que han sufrido. De verdad, de verdad, lo siento mucho", dijo al cierre del especial televisivo. Durante la entrevista, Coronel reflexiona sobre su vida junto al líder del cártel y los costos personales de esa relación. Aunque asegura haber vivido aislada de la violencia y niega haber presenciado asesinatos, reconoce que su matrimonio con Guzmán impactó a su familia.Tras su propia condena en Estados Unidos por lavado de dinero, tráfico de drogas y su participación en la fuga de su esposo, Coronel pasó 36 meses en prisión.
Nacida en California y criada en el poblado La Angostura, en Durango, Coronel recordó que creció en un entorno de pobreza donde el cultivo de mariguana se asumía como un medio de subsistencia. Esa normalización, señaló, moldeó su desconfianza temprana hacia las autoridades y contextualizó las decisiones que marcaron su juventud. Fue en ese periodo, dijo, cuando conoció a Guzmán: ella tenía 17 años y participaba en un certamen local cuando el capo, 32 años mayor, se acercó a ella. Tras cumplir 18, celebraron una unión "simbólica" en la casa de su familia, dando inicio a una relación marcada por la distancia y el sigilo. En el documental, Coronel insiste en que nunca participó activamente en las operaciones criminales del Cártel de Sinaloa ni recibió información directa de su esposo. No obstante, reconoce que su cercanía con Guzmán tuvo efectos devastadores en su entorno: su padre y su hermano fueron detenidos y sentenciados a una década de prisión poco después de su unión con el capo. Entre los episodios que marcaron su vida recordó la captura de 2014 en Mazatlán, cuando fuerzas federales entraron al hotel donde su familia dormía. Coronel dijo haber temido que sus hijas murieran esa madrugada. "El Chapo" escapó en octubre de 2015, pero fue reaprehendido en enero de 2016, y finalmente extraditado a Estados Unidos en un juicio que culminó en 2019, donde ella se convirtió en presencia constante en la sala. Durante ese proceso, fiscales presentaron testimonios y evidencias que describían secuestros, torturas y asesinatos ordenados por Guzmán. Coronel asegura que no puede comentar sobre hechos que no presenció, pero admitió haber sentido "tristeza" cuando el veredicto se confirmó. Mientras Guzmán recibió cadena perpetua más 30 años, ella enfrentó sus propios cargos. En 2021 se declaró culpable de delitos federales relacionados con tráfico de drogas y operaciones financieras vinculadas al capo. Su sentencia de 36 meses incluyó el pago de 1.5 millones de dólares y cuatro años de libertad supervisada. Relató su paso por prisión como un periodo de soledad profunda y reflexión, especialmente por la separación de sus hijas. Desde su liberación, ha intentado rehacer su vida con proyectos personales, incluida su incursión en la moda, y con la intención, afirma, de construir una imagen pública distinta. Sobre la fuga de 2015, evitó pronunciarse y mantuvo una postura ambigua sobre su grado de conocimiento o participación. Aunque evita pronunciarse sobre los crímenes atribuidos a Guzmán, insiste en que sólo puede hablar desde sus propias experiencias. Sin embargo, su mensaje final busca marcar distancia con el legado violento del cártel y ofrecer una disculpa a quienes cargan con las consecuencias.
