Ayer fui al banco, mientras esperaba en la fila, leí muy claramente: Tipo de Cambio $17.00 y $19.20, a la compra y a la venta. Cifras reales.
El precio del dólar, en comparación al peso, se ha disparado exponencialmente en los últimos días. Hay declaraciones serias de empresas extranjeras sobre la incertidumbre financiera en nuestro país. El gobierno trata de minimizar el problema. Pero en realidad, en este próximo sexenio que está por iniciar, nos irá aún más mal, que en el actual. La economía tendrá decrecimiento. Los empleos caerán por los suelos. Olvidemos la generación de riqueza y de una mejor calidad de vida. Los millones de personas en pobreza extrema irán aumentando. El cierre de empresas es inminente. El campo sufrirá no solo por sequía, sino un abandono pleno. La emigración será desorbitada. Como mujer, -y más aún-, como mujer dedicada a la política desde siempre, me resulta lamentable el sometimiento que está mostrando la primer “mujer presidenta” de nuestro país, ante el amo y señor que ordena: Andrés Manuel. Tengo la idea de que habrá un rompimiento entre ellos. He visto como se han explayado los caricaturistas famosos en los periódicos nacionales, mostrando a Claudia en su calidad de títere. Y tendrán algo de razón, pues más que fabulosos y talentosos dibujantes, son analistas políticos. Sin embargo, sostengo que en unos meses la científica despegará su vuelo, cortando los hilos con el patrón. Y vaya, que lo digo con desencanto; pues, eso no será nada bueno. Si se afirmó hace años que Obrador era un peligro para México, y así fue. La Sheinbaum es peor. Mucho peor. Desalmada y frívola. Claudia, se contradice respecto a las reformas; un día declara algo, luego López le ordena lo que hay que decir; y ahí está ella, corrigiendo. Dando espectáculo. Pues pronto hará lo que le venga en gana. No hay que perder de vista, que hay un intervalo entre la toma de posesión del poder legislativo, respecto del ejecutivo; así que en ese periodo, bajo las órdenes del Residente de Palacio, habrán de hacerse toda clase de reformas a capricho de AMLO, sin que pueda hacer mucho la presidenta electa. Ya recibirá de por sí, un país muy lastimado. Con el Plan C, esto será un caos. De los temas más graves, que ponen en franco desequilibrio a los Poderes de la Unión, es lo relativo a que los jueces y magistrados del Poder Judicial, se sometan a voto popular. Aunque sean propuestos por el Ejecutivo, Legislativo, e incluso por Barras y Colegios de Abogados; se corre el riesgo de que sea electo alguien simpático o carismático, y no así, un jurista preparado y capaz. Vaya, la gente se deja llevar hasta por quién es el más guapo, aunque sea un descerebrado. Si ya se ha visto, de forma descarada, al crimen organizado metido de lleno en los procesos electorales; no quisiera imaginar, que pudieran estar involucrados, mediante dinero ilícito o amenazas, en la elección de aquellos juzgadores, que en un momento dado, tendrán la responsabilidad de imponerles penas, si acaso llegaran a enfrentar un proceso judicial. La impunidad en todo su apogeo. Por otra parte, AMLO ya no habló de desaparecer al INE. ¿Por qué lo haría? Si su presidenta es otra mujer más, de las que tiene a su servicio. La señora Guadalupe Taddei Zavala, tiene a toda su parentela recibiendo sueldo de los gobiernos de Morena. Con razón se prestó para el mayor fraude cibernético que jamás se había visto. No señalo a la Institución como tal, sino a la persona en específico. Ya es momento, de percatarnos de lo que realmente sucede en nuestro querido país. Momento de actuar. Ya es momento…