“El descuido es el único sentimiento que puede inspirar nuestra vida sin tener argumentos para defenderse”
Françoise Sagan, Bonjour tristesseNiza, Francia.- El nombre procede del griego antiguo, Nikaia, y significa "aquella por la que llegó la victoria", Niké. En su larga y conflictiva historia Niza ha sido griega, ligur, romana, ostrogoda, parte del Imperio Romano de Oriente, genovesa, provenzal, saboyana, española, sarda y francesa. Aun cuando allí nació Giuseppe Garibaldi, el unificador de Italia, la ciudad fue anexionada por Francia tras un referéndum fraudulento en 1860, en los tiempos de Napoleón III.
El pueblo nizardo se sublevó varias veces contra los franceses, pero con el tiempo la ciudad y la región se hicieron francesas de corazón. Durante la Segunda Guerra Mundial Italia ocupó la ciudad y más tarde los alemanes, y hubo revueltas de la población local. Hoy nadie cuestiona el carácter francés de la ciudad, aunque una parte de la población, sobre todo en zonas rurales, sigue hablando el nizardo, una variante del occitano, lengua romance del sureste de Francia y el noroeste de Italia. El turismo y la construcción han hecho próspera a Niza, hoy la séptima ciudad de Francia. Es la urbe más importante de la Costa Azul y la segunda, después de Marsella, de la región de Provenza-Alpes-Costa Azul. Si Niza fue fundada por un grupo de griegos de Focia, que le dieron un nombre inspirado por Niké, la Victoria, su popularidad como destino turístico fue en parte producto de otra Victoria, la reina de Inglaterra, quien en los últimos años de su vida vacacionaba en Niza en invierno. La primera vez fue en 1895, cuando se alojó en el Gran Hotel de Cimiez, posteriormente hospital, pero este no la dejó satisfecha. En 1896 se quedó otra vez en el Cimiez, pero ya se edificaba el Regina, en el cual se alojó en 1897, 1898 y 1899. Le gustaba tanto Niza que, en los días anteriores a su muerte, el 22 de enero de 1901, dijo: "Ah, si yo estuviera en Niza, me curaría". En 1906 se inauguró un hospital en su honor; en 1912 Louis Maubert le hizo una escultura en un monumento diseñado por Sébastien-Marcel Biasini. La preferencia de Victoria le dio popularidad a la ciudad no solo entre los británicos, sino también entre los franceses, quienes, a pesar de sus constantes expresiones de rechazo a los ingleses, no dejaban de tenerles admiración. Este año vengo a Niza por segunda ocasión. Confieso que me gustan sus construcciones de fines del siglo XIX y su ambiente de fiesta en este verano tardío. Pero si bien ya es una ciudad incuestionablemente francesa, su historia cosmopolita recuerda las turbulencias de un pasado complejo y fascinante de estudiar. La avenida más característica de Niza es La Promenade des Anglais, El Paseo de los Ingleses. En un principio pensé que el nombre se derivaba de esa reina británica que se enamoró de la ciudad por su clima suave en el invierno, pero resulta que surgió de un sendero pedregoso que los visitantes ingleses de principios del siglo XIX, mucho antes de Victoria, recorrían y que se pavimentó décadas después. Se le llamaba entonces el Lungomare degli Inglese, pero porque la ciudad no había sido todavía incorporada a Francia. Las playas de Niza tienen fama en Francia y toda Europa, pero no las recomiendo a un mexicano. Lo que en la Costa Azul llaman playas son extensiones de piedras sobre las que es doloroso acostarse, caminar al mar o hacer el amor. Ningún mexicano irá a Niza a gozar de estas playas que palidecen frente a las arenas suaves de nuestro México, pero la ciudad tiene una alegría especial que se respira en sus callejones llenos de restaurantes, cafés, diversión y movimiento humano. Eso sí lo recomiendo.Perverso
El Tesoro de Estados Unidos no ha demostrado que haya habido una sola transacción ilícita de CIBanco o Intercam, pero ha dado un golpe brutal a los dos. Ayer, CiBanco se vio obligado a vender sus fideicomisos a Multiva. Es perverso. www.sergiosarmiento.com