Cd. de México.- Santiago Giménez fue ovacionado por la afición de su ex equipo Feyenoord, más allá de la sensación agridulce del mexicano tras la caída 1-0 del Milán en la ida del Playoff rumbo a Octavos de la Champions League.
Al 82', varios aficionados del club neerlandés brindaron una ovación de pie al mexicano, al momento de ser sustituido. Incluso había alguna aficionada con el jersey que Santi portaba en el Feyenoord. Así le reconocieron al delantero su aporte con el club.
Giménez no tuvo opciones de gol. Ni Rafa Leao, ni Joao Félix, ni Christian Pulisic pudieron generarle ocasiones frente a la portería. Se tuvo que botar constantemente para asociarse a la ofensiva. Se notaba que sus rivales lo conocían, y muy bien.
El Milán, que el martes en casa buscará la remontada, perdía con gol de vestidor. Al 3', Igor Paixao sacó un disparo de esos que son de rutina para los porteros, no así para Mike Maignan, cuya mala técnica contribuyó a que se le escurriera el balón.
El cuadro italiano no supo cómo vulnerar las líneas rivales. Al 30', Joao Félix trazó templado en diagonal hacia Santi, quien se equivocó al querer habilitar a un compañero en lugar de rematar directo a portería. Al 40', Rafa Leao comandó un contragolpe a tal velocidad que incluso superó al balón, que se le quedó atrás.
El Feyenoord cesó ayer a su técnico Brian Priske, debido a la inconsistencia.
El resultado pudo ser más amplio, pero un disparo de Paixao cimbró el travesaño y ya el complemento intentó con un disparo desde atrás de la media cancha.
Por el Milán fue Joao Félix el más insistente, mas no tuvo la fortuna de su lado.
En las gradas del Estadio también estuvo el mexicano Stephano Carrillo, hace dos semanas aún parte de Santos y ahora jugador del cuadro neerlandés.
Al Feyenoord le bastará un empate el martes en San Siro para clasificar a Octavos y, ahora sí, romper el corazón de Santi Giménez.