Cd. de México.- La aparición de los clavadistas mexicanos como "atletas neutrales" en la lista de competidores de la Copa del Mundo de Clavados de Guadalajara es una situación que se puede revertir y se está trabajando intensamente para ello, aseveró esta tarde la presidenta del Comité Olímpico Mexicano (COM), Marijose Alcalá.
La también cabeza del Comité de Estabilización de la Federación Mexicana de Natación, lamentó el hecho pero recordó que el organismo rector de las disciplinas acuáticas en el País está desconocido por World Athletics por las irregularidades en que incurrió en la pasada administración, cuando la titular de la Conade, Ana Guevara, respaldaba al entonces titular de la FMN, Kiril Todorov, y por eso se toman esas medidas.
"Creo que no nos podemos sentir engañados porque es por todos sabido que la Federación Mexicana de Natación está expulsado de World Aquatics y ya sabemos a quienes les debemos estas situaciones, esto lo provocó quien nunca quiso soltar a quien estaba en la federación.
"Tanto el director (de la actual Conade), Rommel (Pacheco), como una servidora hemos tenido infinidad de reuniones para solventar todos los temas que nos está solicitando World Aquatics, ayer tuvimos una precisamente para el tema y estamos avanzando, creo que hay una posible solución positiva. Por supuesto que estamos conscientes, tanto el director como yo, de que lo mejor es que se toque el himno en caso de que nuestros atletas obtengan medallas y estamos haciendo los dos todo un esfuerzo para lograrlo y esperemos que esta misma semana tener esa información positiva", expuso Alcalá.
Cuando una federación internacional desconoce o suspende a una nacional los deportistas del país en cuestión pueden competir en eventos oficiales, pero bajo la figura de "atletas neutrales" y si consiguen medalla su bandera a himno no pueden ser usados en la premiación.
Los clavadistas tricolores no son ajenos a ello, pues precisamente Pacheco lo padeció en la Copa Mundial de 2016 en Río de Janeiro cuando la FMN estaba suspendida por la negativa del entonces responsable del deporte nacional, Alfredo Castillo, de pagar la multa por la cancelación del Mundial de 2017 otorgado a Guadalajara, y por ello subió a la premiación con una playera de Popeye y no se escuchó el Himno Mexicano.