Ciudad de México.- El Gobierno mexicano no ha podido hacer el segundo pago acordado a ex trabajadores de la extinta Mexicana de Aviación por la compra de algunos activos debido a un laudo vigente que tienen 42 trabajadores de confianza.

Esos ex empleados reclaman un pago de 42 millones de pesos por la venta de aviones y motores en 2018.

Fausto Guerrero, presidente de la Asociación de Jubilados, Trabajadores y Ex trabajadores de la Aviación Mexicana (AJTEAM), dijo que están preocupados de que el proceso se lleve mucho tiempo tiempo, pues está por concluir el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

"En sentido estricto estamos contra reloj. Si bien el Gobierno no nos ha puesto una fecha límite, la preocupación que tenemos es que se acabe. La historia nos ha dicho que una vez que hay cambio de administración hay una pérdida de continuidad", dijo.

En entrevista, explicó que la venta del centro de adiestramiento, los simuladores de vuelo y un edificio ubicado en la Ciudad de México y otro en Guadalajara se tenía que hacer a través de un fideicomiso.

"Es decir, el Gobierno no podía comprar los bienes directamente a Mexicana de Aviación por provenir de un remate de una empresa en quiebra. Entonces la normatividad interna, los limita", expuso.

Para poderle vender al Gobierno, estos activos fueron traspasados al fideicomiso de MRO (centro de mantenimiento), incluyendo nueve aviones y 17 motores que fueron vendidos.

Los recursos de la venta de aviones y motores se repartieron entre varios ex trabajadores, pero a ninguno ex empleado de confianza.

Fausto Guerrero comentó que actualmente las organizaciones sindicales se encuentran negociando con este grupo de trabajadores un monto a pagarles.

Pero no será hasta que sean liquidados que se pueda avanzar en la venta de los bienes de Mexicana de Aviación.

"Estamos muy cerca de llegar a un punto de acuerdo para concluir con el proceso judicial y se pueda continuar con la venta de los activos al gobierno. Se les haría un pago por un monto que estamos negociando", puntualizó.