Chihuahua.- Ante la iniciativa de reforma político-electoral que propone, entre otros cambios, eliminar las listas plurinominales, reservar distritos para grupos vulnerables y modificar criterios de representación proporcional, Coparmex exigió un proceso abierto, técnico y responsable.
En un comunicado, el organismo expuso que, si bien reconoce el mérito de fortalecer la inclusión y legitimar a los legisladores con respaldo ciudadano, advierte riesgos significativos si esta reforma avanza sin un proceso amplio de consulta, análisis técnico y ajuste de fondo a sus mecanismos.
La eliminación de las listas “plurinominales de partido” y su sustitución por un modelo de “mejores perdedores” representa una oportunidad para acercar a los diputados a la ciudadanía. Sin embargo, consideró el organismo, aplicar este criterio exclusivamente por porcentaje de votación —sin considerar el voto bruto— puede generar distorsiones serias en la representatividad.
Un candidato con 15 por ciento en un distrito de alta participación puede obtener más votos que otro con 30 por ciento en uno con baja concurrencia. La representatividad no debe calcularse en abstracto, sino en votos reales.
Asimismo, sostuvo, la propuesta de distritos preferentes para juventudes, diversidad sexual y personas con discapacidad representa un paso valioso hacia la inclusión, pero requiere reglas claras, padrones transparentes y criterios demográficos bien sustentados.
La cuota etaria exclusiva de 18 a 24 años, por ejemplo, resulta restrictiva y puede excluir a jóvenes preparados y comprometidos con mayor experiencia. La juventud no termina a los 25; debe ampliarse el rango hasta los 30 años para garantizar una representación con voz, no solo con símbolo.
El organismo manifestó su preocupación, además, porque esta reforma —de alto impacto institucional y social— avance sin foros públicos, sin parlamento abierto, sin estudios de viabilidad logística y sin diálogo con los sectores que serán directamente afectados.
“Una reforma electoral no puede imponerse en tiempos legislativos reducidos ni construirse desde escritorios aislados. Se requiere la participación activa de la ciudadanía, de la academia, de las comunidades representadas y de los organismos empresariales que trabajamos por un México más democrático y plural”, expuso.
