CDMX.- Viejos conocidos, a Esai Morales y Tom Cruise los une la admiración mutua, aunque en las películas de Misión Imposible, como el villano Gabriel y el héroe Ethan Hunt, quieran matarse.

Nacidos en 1962, cruzaron sus caminos cuando despuntaron como jóvenes promesas de la actuación en Hollywood: Morales en el drama criminal Bad Boys y Cruise en Negocios Riesgosos, en 1983.

Tras ello, sus historias se bifurcan: el boricua ha tenido una carrera discreta (series como Criminal Minds, Ozark), de la que no se queja, y el estadounidense es un ícono del cine blockbuster.

"Tom ha tenido tanto éxito por ser la persona que es. Ha logrado mucho enfocando su mente, con su disciplina y organizándose", considera Morales, en entrevista.

"Yo soy un poquito más intuitivo. A mí me llegan las bendiciones y no siempre organizo todo. A mí la vida me da sorpresas, sorpresas me da la vida...", agrega, tarareando.

Con distintos recorridos, vuelven a chocar en Misión Imposible: Sentencia Final, que se preestrena en México este sábado y domingo.

Mensajero del mal


Tiene sentido que dos histriones contemporáneos, con trayectorias tan disímiles, encarnen a personajes con conflictos personales y profesionales en una de las franquicias de acción más importantes del cine reciente.

En Misión Imposible 7, Morales fue presentado como un formidable adversario del heroico Hunt, y no es poco, pues por la saga han desfilado malvados encarnados por Jon Voight, Henry Cavill y Philip Seymour Hoffman.

"¿Qué es lo que motiva a Gabriel para hacer lo que hace... que es bastante fuerte, feo, oscuro? La diferencia entre Gabriel y yo es muy grande. Yo hago lo más que puedo para ser una persona buena".

Gabriel es un espectro que atormenta al héroe, a quien envidia: asesinó décadas atrás a una mujer que éste amaba y, en Misión Imposible 7, a una de las mejores aliadas de Ethan, Ilsa (Rebecca Ferguson).

El antagonista, quien regresa en el octavo capítulo, simboliza al arcángel mensajero de Dios, aunque el de esta historia no trae consigo ninguna buena nueva, sino promesas de caos y destrucción.

Aliado de "La Entidad", inteligencia artificial capaz de colapsar el mundo, es además un excepcional estratega, dotado en las peleas cuerpo a cuerpo y con armas blancas.

"Él cree que el del poder debería ser él, porque tiene una visión", desliza Morales, quien cree que Gabriel no teme perder la vida.

"¿Qué puede ser más espantoso que una persona que ni la muerte le importa? Él sabe lo que quiere y está determinado a obtenerlo".

Orgullo latino


Morales considera que la latinidad del personaje le proporciona a su trama una muy interesante lectura sociopolítica.

"Nosotros somos personas que hemos luchado, que hemos estado debajo de otros poderes en el mundo, pero tenemos algo que sobrevive, que sobrepasa, que se presta a que venzamos lo que nos amenaza".

Aunque tiene más de 100 créditos en pantalla, no había llegado jamás a las alturas comerciales que ha pisado con Misión Imposible, así que se sabe con suerte.

"Soy el primer latino en esta franquicia con un papel mayor. No quiero describir todo lo que pienso, no quiero revelar tanto...

"Pero puedo decir que es un honor estar en este elenco, estar con Tom, con (el director) Christopher McQuarrie. Es un honor gozármela tanto".

Se lo deben a ellas


Esai Morales cree que si Tom Cruise y él han llegado hasta donde están, parte de ello se lo deben a haber sido criados por mujeres.

"Al igual que yo, él no tuvo la mejor infancia, la mejor juventud. Crecimos sin nuestros padres a nuestro lado. Fuimos criados por mujeres, así que tenemos un amor tremendo por nuestras madres y hermanas, más allá de lo normal".