Chihuahua, Chih.- La aparición de tres cuerpos colgados, ataques con drones a las Bases de Operaciones Interinstitucionales (BOI) y reportes de enfrentamientos y desplazamiento forzado en diversas comunidades son el saldo de la disputa entre grupos criminales por el control territorial en Guadalupe y Calvo, la cual suma 210 víctimas desde 2021, de acuerdo con la estadística de homicidios de Ficosec.
‘Los Salgueiro’ y ‘Los Arellanes’ lo han convertido en una zona de balaceras, desplazados, colgados y ataques con drones a células BOI
La aparición de tres cuerpos colgados, ataques con drones a las Bases de Operaciones Interinstitucionales (BOI) y reportes de enfrentamientos y desplazamiento forzado en diversas comunidades son el saldo de la disputa entre grupos criminales por el control territorial en Guadalupe y Calvo, la cual suma 210 víctimas desde 2021, de acuerdo con la estadística de homicidios de Fiscosec.
Durante años este municipio ha sido escenario de hechos violentos; sin embargo, en los últimos cuatro se ha intensificado la guerra entre “Los Salgueiro”, del Cártel de Sinaloa y facciones de “La Línea” como “Los Arellanes”, provenientes de Camargo y sus operadores “Los Ramoncillos”.
Apenas el miércoles por la noche fueron encontrados los cuerpos de dos hombres que colgaban del arco de bienvenida a la cabecera municipal, los cuales no habían sido identificados oficialmente hasta ayer. Junto a los cuerpos había un narcomensaje donde presuntos miembros de la delincuencia organizada amenazaron con hacer una “limpia” en la región.
Tras este hecho, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), a través de Comunicación Social, informó que iniciaron las investigaciones para dar con los responsables y continuarán con los patrullajes en la zona.
Unos días antes, el 29 de diciembre, otro cadáver fue dejado en el mismo sitio. El fallecido respondía al nombre de Ángel Torres, de 19 años, quien publicó en su cuenta de Tiktok varios videos de él junto a otros hombres armados en “El Pinito”.
En esta comunidad ocurrió un ataque con bombas lanzadas desde drones a elementos de las células BOI el 24 de diciembre. En esa ocasión fueron dos artefactos explosivos detonados, pero sólo uno de ellos causó daños a la carrocería de una patrulla de la Guardia Nacional.
El 27 de diciembre hubo una segunda agresión en el poblado conocido como “El Carnero”, donde elementos militares, policías estatales y ministeriales que viajaban en célula fueron sorprendidos nuevamente por explosivos enviados desde drones que dejaron una camioneta oficial militar totalmente calcinada.
Posteriormente, el martes 31, hubo un tercer ataque, esta vez en Dolores, cuando elementos policíacos apoyaban a algunas familias a salir del lugar. De acuerdo con los reportes, fueron ocho las detonaciones operadas que, por fortuna, no dejaron lesionados.
Tanto en Dolores, como en El Carnero, San Francisco de Los Salgueiro y El Pinito han habido reportes de varios episodios de desplazamiento a causa de la violencia, sólo en el último mes.
A mediados de diciembre, denuncias de los habitantes revelaron que familias enteras llegaban a la cabecera municipal tras ser expulsadas de sus hogares por la presencia de sicarios de “La Línea” y “Gente Nueva”.
Sobre el éxodo de personas, la titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAVE), Norma Ledezma Ortega, indicó que aunque no hay denuncias formales, han apoyado de manera interinstitucional desde la comisión de Desplazamiento Forzado Interno.
“Como Comisión de victimas no intervenimos como tal, ya que no hay denuncias, sin embargo sí apoyamos para que todo el apoyo humanitario sea brindado a estas familias de manera integral”, dijo.
Otros hechos violentos ocurridos durante el mes incluyen la privación de la libertad y asesinato de un trabajador de la mina San Julián, cuyo cuerpo fue encontrado el 4 de diciembre.
El día 9 hallaron a un hombre sin vida en “El Piélago”, Dolores, así como de dos hombres degollados cerca de “El Pinito”, uno de los cuales había sido privado de la libertad horas antes en la cabecera municipal, donde los plagiarios también quemaron una tienda de Conasupo.
Además, a lo largo del año hubo otros eventos de alto impacto. El 5 de julio, fueron ejecutados tres hombres en la comisaría de la comunidad Llano Grande; uno de ellos tenía apenas 16 años.
Entre el 18 y 19 de agosto, vecinos de la comunidad de Dolores, ubicada a pocos kilómetros del centro operacional de “Los Salgueiro”, dieron a conocer a través de llamadas telefónicas y videos, que temían por su integridad física, ante el enésimo enfrentamiento entre sicarios de ambos bandos.
Lo mismo ocurrió a inicios de septiembre en la comunidad Cinco Llagas, donde incluso organizaciones levantaron la voz ante el riesgo que tenían los habitantes de ser desplazados por la inseguridad. Algunas personas solicitaron ser sacadas del poblado y hacia el día 5 salieron a la luz imágenes de supuestas avionetas pertenecientes a “Los Salgueiro” que habían sido calcinadas.
El 25 de septiembre ocurrió el homicidio de un agente de la Policía Municipal activo de dicho lugar y cuyo cuerpo fue encontrado la tarde del miércoles 25 de septiembre, a un costado de la brecha que conduce de la localidad de Llano Grande a la comunidad de Milpillas.
El 2 de octubre fueron localizados los cuerpos de cinco hombres, presuntos integrantes del grupo de “Los Salgueiro”, dentro una camioneta oficial de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que había sido reportada como robada por el trabajador de la paraestatal que logró escapar con vida.
En total son 61 los homicidios ocurridos en Guadalupe y Calvo entre enero de 2024 y el primero de enero de 2025; sin embargo, desde 2021, han sido asesinadas 210 personas, en medio del conflicto entre los grupos antagónicos que buscan el control de esta localidad.
Dicha disputa fue detonada por el desplome de una avioneta que iba de Camargo a Los Mochis en junio de 2022. En la aeronave viajaba dos adultos y cuatro menores de edad, familiares de Ildefonso "Poncho" Arellanes, quienes murieron a causa del accidente aéreo, mismo que “La Línea” atribuyó al grupo de “Los Salgueiro”, que encabeza Ruperto Salgueiro.
A partir de entonces, “Los Arellanes”, radicados en Camargo, han intentado desplazar al Cártel de Sinaloa con apoyo de sus aliados “Los Ramoncillos”, liderados por Ramón Medívil, quienes tienen a su cargo la operación delictiva desde Guadalupe y Calvo hasta Parral.
Como consecuencia, en 2021 Ficosec contabilizó 55 homicidios dolosos en Guadalupe y Calvo; misma cifra que en 2022. En ese último año también documentaron casos de desplazamiento forzado, en enero y junio, donde al menos 40 familias abandonaron las comunidades de San José del Rincón, Santo Domingo, Calabazas, El Tigre y Los Espinos.
Para el 2023 hubo una reducción de asesinatos, con 39; sin embargo, reportaron más eventos de desplazamiento ya que en en junio 39 personas de la etnia tepehuán, entre ellas 31 menores de edad, tuvieron que huir de las comunidades de San Gerónimo, Santa Rita y La Sierrita y en diciembre la Diócesis de la Tarahumara narró una serie de agresiones directas contra la población de diversas comunidades como Santa Tulita, Puerto de Animas y Puerto Riyito.