Más de 100 personas murieron el martes y muchas otras resultaron heridas en una estampida durante un acto religioso hindú en el estado de Uttar Pradesh, en el norte de la India, donde se habían congregado miles de devotos.
La mayoría de los muertos hasta el momento eran mujeres y niños que parecían haberse asfixiado aplastados, en el distrito de Hathras, dijo Ashish Kumar, magistrado del distrito de esa localidad.
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"Por ahora, el número de muertos confirmado es de 116 personas", declaró Chaitra V., alto funcionario de la región administrativa de Aligarh, que incluye Hathras.
Los funcionarios locales sugirieron que el calor y el hacinamiento habían desatado el pánico; las temperaturas en Hathras el martes se acercaron a los 100 grados Fahrenheit, con una humedad muy alta. Testigos presenciales, en declaraciones a los medios de comunicación locales, dijeron que algunas de las víctimas habían caído en una zanja de drenaje unas encima de otras.
El acto, una gran reunión de oración hindú, estaba organizado por un gurú conocido localmente como Bhole Baba, así como por Sakar Vishwa Hari, que lleva más de dos décadas dirigiendo este tipo de encuentros. El aplastamiento tuvo lugar al final de la reunión, que se celebraba bajo una gran carpa.
"Cuando terminó de predicar y abandonaba el escenario, sus devotos se abalanzaron de repente hacia él para tocarle", dijo Yogi Adityanath, ministro principal de Uttar Pradesh, en un vídeo publicado por su oficina. "Cuando los voluntarios intentaron detener a la multitud, se produjo este incidente".
Añadió que se había abierto una investigación sobre la causa de la estampida.
Rajesh Singh, oficial de policía en Hathras, dijo que un permiso para el evento había permitido 5.000 personas. Pero las primeras informaciones procedentes del lugar de los hechos indicaban que la multitud era mucho mayor, dijo en una entrevista telefónica.
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Más de 150 personas han sido ingresadas en diferentes hospitales, dijo.
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Umesh Kumar Tripathi, un funcionario médico en el vecino distrito de Etah, en el oeste de Uttar Pradesh, dijo que a medida que más víctimas fueron llevadas a los hospitales, "el número de muertos puede aumentar."
El primer ministro Narendra Modi, que hablaba en el Parlamento indio cuando le llegó la noticia de las muertes, dijo que su "administración está ocupada en las labores de socorro y rescate."
"Aseguro a todo el mundo a través de esta Cámara que se ayudará a las víctimas de todas las maneras posibles", dijo el Sr. Modi.
El gurú que dirigió la congregación es un antiguo empleado del gobierno antes de convertirse en un autodenominado líder espiritual y hacerse con un gran número de seguidores, según informan los medios de comunicación indios. Durante sus sermones suele estar acompañado por su esposa en el escenario, ambos sentados en grandes tronos. Suele ir vestido de blanco, ya sea con trajes occidentales con corbatas de colores o con el traje blanco tradicional indio.
Vídeos no verificados en las redes sociales mostraban un gran número de cadáveres, en su mayoría de mujeres, en el patio de lo que parece un hospital público.
Hathras se encuentra en Uttar Pradesh, el estado más poblado de la India, con unos 240 millones de habitantes.
En India, las estampidas durante las peregrinaciones religiosas son relativamente frecuentes, a menudo debido a la escasa aplicación de las medidas de seguridad pública. En una de las más mortíferas de los últimos años, más de 100 personas murieron en 2013 en el estado de Madhya Pradesh, en el centro-norte del país, durante una procesión del Navratri, celebración de la diosa hindú Durga.
En los últimos años, las autoridades han aumentado la vigilancia de las grandes concentraciones religiosas desplegando más agentes de policía y utilizando drones.
"Tanto el gobierno estatal como el federal han fracasado a la hora de desarrollar un enfoque sensible hacia la gestión de multitudes", afirmó Manoj Kumar Jha, miembro del Parlamento indio. "Como nación somos buenos atrayendo multitudes, pero no buenos gestionándolas".
"Cada año se repiten este tipo de incidentes y no aprendemos nada".