Washington DC, Estados Unidos.- El Secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, señaló que la exención arancelaria a productos electrónicos es temporal, pues en uno o dos meses serán incluidos en las tarifas aplicadas a semiconductores.
Entrevistado por la cadena ABC, el funcionario fue cuestionado por la decisión del Gobierno de Donald Trump de eximir de los aranceles recíprocos a dispositivos como smartphones, computadoras, chips, pantallas planas, entre otros.
En respuesta, Lutnick aclaró que la exención no es permanente y que esos productos se incluirán "en uno o dos meses" en un paquete especial de gravámenes a semiconductores.
"Todos esos productos (electrónicos) van a entrar en la categoría de semiconductores, y van a tener un tipo de arancel especial para asegurarse de que esos productos se relocalicen. Necesitamos tener semiconductores, necesitamos tener chips, y necesitamos tener pantallas planas, necesitamos tener estas cosas hechas en Estados Unidos.
"No podemos depender del sudeste asiático para todas las cosas que operan para nosotros", dijo Lutnick al presentador del programa "This Week", Jonathan Karl.
"Entonces, lo que está haciendo es decir que están exentos de los aranceles recíprocos, pero están incluidos en los aranceles a los semiconductores, que llegarán probablemente en uno o dos meses. Así que estos llegarán pronto", añadió.
Ayer, se informó que el Gobierno de Estados Unidos emitió una norma que libró a los smartphones, computadoras, semiconductores y otros electrónicos de algunas de las tarifas de represalia contra Beijing.
Un mensaje, emitido a última hora del viernes por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, divulgó una lista de productos que no enfrentarían los gravámenes que Trump impuso a los productos chinos como parte de una guerra comercial cada vez más intensa.
Las exclusiones también aplicarían para módems, routers, unidades flash y otros bienes tecnológicos que en su mayoría no se fabrican en Estados Unidos.
Este domingo, Lutnick aclaró que la exención no será definitiva y tampoco está abierta a negociación internacional.
Asimismo, dijo que los productos implicados son estratégicos, por lo que deben fabricarse en territorio estadounidense por razones de seguridad nacional.
"Esto no es como una especie de exención permanente", insistió.