Chihuahua.- La exdirectora de Salud de Chihuahua que había sido nombrada como coordinadora de delegaciones del ISSSTE, Mirna Beltrán Arzaga, fue removida de su cargo en la institución federal, en medio de escándalos recientes en esta entidad y tras la llegada del nuevo director, Martí Batres.

En febrero de este año, la entonces directora nacional del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Bertha Alcalde Luján, designó a Beltrán Arzaga como titular de Oficinas de Representación en todo el país.

La chihuahuense asumió el cargo como parte de la estrategia de mejora en las instituciones a cargo del Gobierno federal, entre las cuales está la conformación de personal, así como todo lo relacionado con el mantenimiento de clínicas y centros de salud en la nación.

Durante su administración, el organismo de salud fue señalado por nepotismo y opacidad en información sobre el accidente de una ambulancia El titular administrativo de la dependencia fue acusado de contratar a su cuñada, además de amenazar y despedir a una empleada

La doctora Mirna Beltrán, con estudios de Enfermería por la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH), también egresó como médico partero por la Universidad de Guadalajara y cuenta con Maestría en Gestión Directiva de Salud.

Dentro de su formación laboral, la doctora Mirna Beltrán fue enfermera en el Hospital CIMA; fue jefa del Departamento de Epidemiología de la Jurisdicción Sanitaria número 1, dentro de los Servicios de Salud de Chihuahua.

Asimismo, fue coordinadora estatal del programa de micobacteriosis en los Servicios de Salud de Chihuahua, y coordinó el área de Consulta de Medicina General, en Pensiones Civiles del Estado (PCE).

En la administración estatal pasada fue directora de Prevención de Enfermedades y subsecretaria de Prevención y Promoción de la Salud del Estado de Chihuahua, desde donde lideró la estrategia contra la pandemia. Duró en ese cargo entre 2020 y noviembre de 2023, fecha en la que renunció.

Ayer, tras darse a conocer que el ISSSTE ha dejado sin atender quejas y señalamientos por diversas irregularidades, especialmente por el accidente de una ambulancia que se accidentó a finales de agosto y costó la vida de seis personas, fuentes de la dependencia federal en Chihuahua dieron a conocer la remoción de la chihuahuense, ocurrida semanas atrás.

La hoy exfuncionaria habría dimitido tras la llegada del nuevo titular que relevó a Alcalde Luján, Martí Batres Guadarrama, designado por la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, a comienzos del mes de octubre.

Aunque las razones no han sido dadas a conocer de forma oficial por la instancia federal, de la misma forma que ha dejado sin respuesta otras solicitudes de información por diversas irregularidades y escándalos, fue confirmado que no está al frente de las delegaciones que tiene el ISSSTE en todo el país.

Escándalos y quejas contra el ISSSTE

Durante la gestión de Beltrán como jefa de las delegaciones del ISSSTE en el país, fue designado, en el mes de marzo, el actual titular administrativo de la dependencia federal en Chihuahua, Gerardo Iván Sapién Martínez, quien enfrenta diversos señalamientos.

El 1 de junio de este año, el delegado administrativo del ISSSTE colocó en un puesto bajo su mando a su cuñada, Lourdes Anabel Navarrete, esposa de su hermano Alejandro, con el cargo de supervisora administrativa de hospital.

Por denuncias públicas de afectados, sustentadas con la evidencia documental, empleados reclamaron a Sapién por el acto de nepotismo, documentado mediante el proceso de contratación y las actas civiles que prueban el parentesco.

Al día, siguiente, fue despedida y amenazada por Sapién la subdirectora administrativa del Hospital Lázaro Cárdenas, Carmen Luz Adame Torres, como supuesta responsable de que diera a conocerse el nepotismo del funcionario.

El 26 de agosto, el delegado fue denunciado por amenazas y discriminación ante la Fiscalía General de la República (FGR), que abrió la carpeta de investigación para esclarecer lo ocurrido; hasta la fecha no han reportado avances.

Luego, el 31 de agosto, en la carretera Chihuahua-Cuauhtémoc, murieron seis personas a bordo de una ambulancia del ISSSTE; el organismo ha negado responsabilizarse por los daños y no ha dado explicaciones de la sobrecarga de la unidad ni del manejo administrativo de la misma.

El 6 de septiembre, personal directivo a nivel estatal y nacional, encabezado por Beltrán Arzaga y Sapién Martínez, se reunió para determinar una postura pública sobre el accidente, pero terminó por esconder los resultados de la reunión.

El 27 de septiembre, el Instituto negó tener conocimiento del nepotismo en que incurrió el delegado administrativo, mediante una respuesta entregada vía Plataforma Nacional de Transparencia, que intentó eludir en una ocasión previa.

Poco más de un mes después del accidente de la ambulancia, los familiares de los fallecidos denunciaron que seguían sin recibir respuestas del organismo, además de que exigieron la destitución de los directivos y procedieron por la vía jurídica.

En el comienzo de la nueva administración del ISSSTE, el 17 de octubre, reportaron otra de las irregularidades registradas en el manejo administrativo de la institución, cuando más de 130 personas, entre pacientes y familiares, fueron desalojados de la clínica Lázaro Cárdenas, por una fuga en las líneas de oxígeno, lo que ocasionó gran movilización de los cuerpos de emergencia, sin que el organismo informara y explicara al detalle lo ocurrido.

Además, violaciones a derechos humanos

Entre 2021 y el año actual, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ha dirigido sólo tres recomendaciones al ISSSTE, por quejas registradas en el estado de Chihuahua.

En diciembre de 2021, la instancia emitió la Recomendación 121/2021 al director general, Pedro Mario Zenteno Santaella, por la inadecuada atención médica proporcionada a una persona en contexto de migración, de nacionalidad cubana, portadora de diversas enfermedades crónico-degenerativas, quien ingresó el 15 de noviembre de 2019 al Hospital General “B” en Ciudad Juárez.

La persona migrante falleció por inadecuada atención médica, aseguró la CNDH. El personal actuó con negligencia por omisión, al egresar a la víctima precipitadamente, sin establecer un diagnóstico certero y oportuno complementado con exámenes de laboratorio, estudios radiológicos y una exploración física y neurológica completa.

Además, dejaron pasar mucho tiempo entre la hemorragia que sufrió y la instauración de medidas terapéuticas, a sabiendas de que en dos atenciones médicas anteriores refirió presentar datos de daño neurológico.

Todo ello contribuyó, junto con otros factores de riesgo, como el ser portadora de diabetes mellitus tipo 2, hipertensión arterial, dislipidemia, obesidad, antecedente de cáncer pulmonar y renal, al deterioro de su estado de salud y su posterior fallecimiento.

Además, el 3 de julio de este año, la CNDH emitió la Recomendación 84/2024 al acreditar violaciones a los derechos humanos de una mujer derechohabiente debido a la inadecuada atención médica que recibió en la Clínica del Issste en la ciudad de Parral.

En la queja que atendió el organismo, la víctima refirió que acudió a las 10:00 horas del 31 de agosto de 2022 al citado nosocomio para que le practicaran una cesárea que estaba programada a las 15:00 horas; sin embargo, a las 16:30 le informaron que ésta no se llevaría a cabo debido a que el quirófano se había inundado.

De la investigación que desarrolló la CNDH determinaron la existencia de violaciones a los derechos humanos de la víctima, pues se constató que la atención otorgada fue inadecuada, toda vez que no se realizó un control prenatal, ni de las comorbilidades que ella presentaba, tampoco efectuaron un monitoreo estrecho y control óptimo del embarazo, impidiendo con ello que identificaran oportunamente complicaciones de salud. Estas omisiones la colocaron en un riesgo innecesario, dando como resultado la pérdida del producto de la gestación.

En otro caso, el 26 de julio de 2023 la CNDH determinó que médicos del Hospital Lázaro Cárdenas de la capital, incurrieron en omisiones y dilaciones para atender a una persona de 64 años, quien fue atropellada, ocasionando con ello el deterioro de su estado de salud y posterior deceso, por lo cual emitió la Recomendación 96/2023.

La investigación de una queja presentada el 23 de marzo de 2021 ante la CNDH permitió encontrar elementos para acreditar violaciones a los derechos humanos a la protección de la salud y a la vida por inadecuada atención médica de dicha persona, así como la vulneración al derecho de acceso a la información en materia de salud de siete víctimas indirectas.

Según el expediente, la víctima fue atropellada la mañana del 22 de marzo de 2020, por lo que fue ingresada al citado hospital con dolor de tórax. Fue valorada por una persona servidora quien omitió asentar en la nota médica los signos vitales. A pesar de que describió algunos síntomas que presentaba, no señaló los ruidos respiratorios y su distribución, las condiciones del cuello, la tráquea, saturación de los niveles de oxígeno y pulsos, además de que tampoco hizo una exploración de la región abdominal y pélvica.

Aun cuando fue solicitado un estudio tomográfico de cráneo, tórax y abdomen, dicho análisis no fue autorizado por uno de los médicos del nosocomio, situación que infringió diversos artículos del Reglamento de Servicios Médicos del Issste y que ocasionó que, a las cinco de la tarde de ese mismo día, la víctima fuera diagnosticada con presión arterial disminuida y somnolencia.

A las 19 horas de ese día se volvió a solicitar la realización del referido estudio, pero ya no fue posible llevarlo a cabo dado que el paciente se encontraba intubado y con hipotensión arterial.

Luego, fue sometido a una laparotomía en la que se halló una hemorragia, lesiones en el hígado grado II y en el lóbulo hepático izquierdo. Perdió la vida en la madrugada del 23 de marzo a causa choque hipovolémico, trauma cerrado de tórax, abdomen y otras complicaciones de salud.