El pasado martes fueron localizados cuatro cadáveres en el kilómetro 63 de la carretera Aldama-ojinaga, cuyas identidades corresponden a hombres que fueron reportados como desaparecidos entre el 7 y 8 de junio, sumando al menos 66 víctimas que ha dejado la disputa entre grupos criminales por el control de este corredor desde 2021.

Los nombres de las víctimas eran: Francisco Javier M., de 26 años, Kevin Ulises M. M., de 24; además de Édgar Adrián T. I. y Jonathan Israel L. C., de 36 y 26 años, respectivamente. Todos presentaban el llamado ‘tiro de gracia’, informó la Fiscalía General del Estado (FGE).

De acuerdo con datos de las corporaciones de seguridad y archivos periodísticos, la región que abarca los municipios de Aldama, Coyame, Manuel Benavides y Ojinaga tiene años bajo el control de “La Línea” o Nuevo Cártel de Juárez (NCDJ), sin embargo, la presencia en el Valle de Juárez de “Los Cabrera”, agrupación ligada al Cártel de Sinaloa, y en particular a Ismael “Mayo” Zambada, ha generado diversos enfrentamientos y asesinatos.

“La Línea” dominó dicho corredor bajo el mando de Sergio Menchaca Pizarro, alias “El Menchaca”, detenido el 17 de agosto de 2023 en Presidio, Texas, tras entregarse voluntariamente a las autoridades estadounidenses quienes tienen cargos contra el líder criminal desde 2008.

Dos años antes, el 1 de junio de 2021, autoridades estatales realizaron operativos para debilitar a esta agrupación, una de ellas fue en un inmueble localizado en Ojinaga, propiedad de "El Menchaca", en el que aseguraron vehículos de lujo, armas y drogas. Días después, el 2 de junio, fue asesinado el comandante de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), Andrés Lara Durán.

El agente fue interceptado mientras viajaba por la carretera que conduce al poblado de Falomir. Tras ser privado de la vida, su cuerpo fue incinerado.

El 25 de septiembre de ese mismo año fue reportada la desaparición de 13 personas migrantes a altura de Coyame. Fue hasta agosto de 2023 cuando fueron localizados los restos de 10 de ellos en una fosa de 1.20 metros de profundidad y cubierta con una plancha de concreto, en la comunidad de El Mimbre, en el mismo municipio.

Tras el hallazgo, el fiscal general César Jáuregui Moreno, declaró que la muerte de estas personas fue a causa de la disputa entre las organizaciones criminales del Cártel de Sinaloa y “La Línea” por el tráfico de migrantes.

El 14 de julio de 2022, el abogado Rodolfo Humberto A.A., de 28 años, fue secuestrado en el municipio de Aldama el 19 de julio; su cuerpo fue encontrado en Ojinaga 11 días después. En este caso hubo una mujer detenida.

El domingo 23 octubre del mismo año ocurrió una balacera en las calles 18a y Rojas Domínguez, en el municipio de Ojinaga; el saldo fue de cuatro muertos (tres en el lugar de los hechos y otro en días posteriores). Entre ellos estaba Fernando Naranjo Flores, agente de la Guardia Nacional.

Aunque en 2023 bajó considerablemente la incidencia delictiva, el año pasado hubo un repunte marcado en los hechos violentos en aquella región, luego de que un grupo de exmiembros de “La Línea” hicieran alianza con “Los Cabrera”, tras ser expulsados por el nuevo líder de la organización, “El Menchaquita”, hermano de “El Menchaca”.

El 30 de mayo de 2024 fueron reportados como desaparecidos Francisco Iván Flores Hernández, de 31 años; Fabián Alberto Ramos Torres, de 38; Abigael Ramos González y su hijo Abigael Ramos Torres, de 62 y 31 años, respectivamente, además de Sandra Patricia Salais Calzadías, de 50 años, conductores de plataforma que iban a Ojinaga.

Sus cuerpos, con huellas de tortura, fueron localizados el 7 de junio a la altura del kilómetro 25 del Libramiento Oriente, en la ciudad de Chihuahua. César Jáuregui dio a conocer tras el hallazgo que “La Línea” sería responsable del crimen.

También en 2024, durante septiembre, la región fue escenario de una cruenta racha de enfrentamientos y asesinatos. El día 8 un grupo de sicarios de Durango, reclutados por el exintegrante de “La Línea”, Roberto G. H., alias “El 04”, incursionaron en Ojinaga, Manuel Benavides y Coyame, dejando como saldo a seis personas sin vida y un agente municipal herido.

El 16 de septiembre hubo un “topón” entre células delictivas en el kilómetro 46+200 de la carretera que conduce de Parral a Jiménez, justo entre los municipios de Coronado y Allende, entre integrantes de “La Línea” y “Los Salgueiro”, que dejó nueve hombres sin vida.

Aunque ocurrió en otra región, el fiscal Jáuregui reconoció que este hecho estaría relacionado con la disputa interna de “La Línea” en la región de Ojinaga.

Esta serie de eventos concluyó el 20 de septiembre con el hallazgo de 11 cuerpos que fueron dejados a las afueras del municipio de Ojinaga, con huellas de tortura, dos de ellos decapitados, cerca de las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de Ojinaga, ubicadas en la calle Séptima.

Sobre los cadáveres había una lona con un mensaje firmado con las iniciales NCDJ dirigido a “Roberto” (El 04), a quien acusaban de traicionar a “La Línea”, trayendo a sicarios de Durango.

Al historial de violencia, ahora suman los hechos de este año. El jueves 30 de enero fueron localizadas dos “narcofosas” con dos osamentas, por la zona “El Falomir”, una localidad en el municipio de Coyame del Sotol.

En la zona de Aldama el número de incidentes en el año ha ido en aumento por el mismo conflicto entre “La Línea” y “Los Cabrera”, ya que los segundos han ingresado a la zona en busca de Daniel H. R., alias “El Palillo” o “El Palito”, operador de sus rivales en ese municipio, según han reportado las autoridades.

El pasado 26 de febrero hubo una fuerte balacera en la colonia Esperanza que dejó a una persona sin vida. Pese a que fue desplegado un operativo de seguridad, en la carretera que conduce a Ojinaga fueron encontrados ponchallantas, lo que dificultó la movilización de las autoridades.

El 1 de marzo dos personas fueron ejecutadas en hechos distintos, el primero en la avenida Constitución y calle 26ª y el segundo el cruce de las calles Lago Colinas y Lago de la Cuota, en el fraccionamiento de San Jerónimo del mismo municipio.

El 12 de abril, cerca de las 7:00 de la mañana, fue encontrado el cuerpo desnudo de un hombre justo al pie de las letras de bienvenida al municipio de Aldama, el cual estaba cubierto con una lona blanca con el mensaje: “Aquí está tu punto, entregar a: Roberto González Herrera. Se estaba muriendo de hambre como los dos que se entregaron a los wachos, de perdida llevarles comida, muerto de hambre (sic)”.

El 16 de abril dos hombres fueron asesinados a balazos en el municipio de Aldama, entre las localidades de La Mesa y La Calera.

El 23 de abril hubo una jornada violenta; primero fue localizado otro cuerpo desnudo en las letras de Aldama; la víctima fue asesinada a golpes. Horas más tarde fue reportado un enfrentamiento en la comunidad de Falomir, mientras que en la carretera Ojinaga-chihuahua, sujetos armados detuvieron un tráiler con el que bloquearon el paso e incendiaron una camioneta cerca de la caseta de peaje.

Hace un mes, el 12 de mayo fue dejado un cuerpo en la carretera Aldama – Ojinaga en el entronque hacia la comunidad Placer de Guadalupe.

Mientras que esta semana, además de los cuatro cuerpos localizados el martes, un hombre de 24 años, identificado como Alex O. A. fue asesinado el lunes 9 mientras viajaba en un vehículo Jetta 2014, en la comunidad de La Mesa.

La violencia no ha estado limitada a las muertes, ya que existen desapariciones en la región, así como denuncias de narcorretenes en la carretera, como los señalados el 27 de mayo y ataques armados a propiedades, como uno ocurrido en Coyame 13 de marzo.