Ensenada, México.- Luego que un grupo de activistas bloqueó el convoy de la Presidenta Claudia Sheinbaum, a las afueras del nuevo Hospital General Regional, la Mandataria salió de su camioneta, subió al peldaño de una puerta de metal y pidió un altavoz.

"Ya lo dije, no se va a hacer nada que no quieran hacer", les dijo, acompañada de la titular de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.

Los inconformes alertaron de la construcción de un megapuerto, lo que abre la posibilidad de que lleguen más contenedores a esta ciudad y sean cerradas las playas, actualmente abiertas al público en general.

"Que se abra el diálogo, y si no quieren, no, pero diálogo, nadie se niega al diálogo, y si no quieren, no", insistió la Presidenta .

"¡Playas sí, megapuerto no!", gritaron los activistas, que al final permitieron la salida de Sheinbaum y su comitiva.

La Presidenta también escuchó las demandas de una madre que enfrenta el atropellamiento de su hija y la impunidad del responsable.

"Ella está muy mal de su pierna y nadie me hace caso, no hay orden de aprehensión", le dijo la señora.

"Ella es Rosa Icela Rodríguez, Secretaría de Gobernación, ella te va a llamar", prometió Sheinbaum.

La tía de una niña asesinada la semana pasada en Rosarito, Mónica Duarte, también pidió justicia en el caso, pues el asesino supuestamente fue sentenciado a cinco años de prisión.