Cd. de México.- La privación de la libertad y asesinato del paramédico de la Cruz Roja, Obed Jair Reyes López, provocó que la base de esta institución en la localidad de Altata, Navolato, en Sinaloa, suspendiera labores.

"Por respeto a la memoria de Obed Jair y ante la amenaza latente a quienes brindan servicio humanitario, la base Altata suspendió actividades de manera inmediata hasta que se garantice la seguridad de todo el personal", indicó.

De acuerdo con reportes locales, el socorrista, de 25 años de edad, fue privado de la libertad la tarde de este viernes 11 de julio en Altata; en la noche fue hallado baleado en la sindicatura de Costa Rica, por lo que fue trasladado a un hospital del IMSS, donde murió.

Compañeros de la víctima lo recordaron como un gran ser humano, con mucha entrega y vocación.

"La muerte siempre duele, pero cuando se trata de alguien que dedicó su vida a salvar la de los demás, el dolor es más profundo. Hoy nos toca despedir no sólo a un compañero, sino a un ser humano que vivía con vocación, entrega y compasión en cada servicio, en cada guardia, en cada llamado de auxilio", posteó José Luis Rubio González

"Obed, hoy brillarás más que nunca!! Hoy es una comunidad, un grupo, una familia, que se apaga tras la partida de un buen hombre, un gran ser humano, un excelente profesional; dejas un vacío en quienes tuvimos la dicha de conocerte y convivir contigo. Tu esencia perdurará en los recuerdos y momentos que formaste en nosotros", añadió Karen Carrillo.

La Cruz Roja, a través de su delegación estatal, condenó el hecho y pidió que este caso no quede impune.

"Exigimos a las autoridades agilizar la investigación y reforzar la vigilancia en zonas de riesgo para todos los socorristas. Convocamos a la sociedad civil y asociaciones de víctimas a respaldar nuestra demanda de protección efectiva".