Ciudad de México.- Por lo menos desde 2006 se sabía que Hernán Bermúdez Requena, el ex Jefe de la Policía de Tabasco de Adán Augusto López, era una fichita.

En ese año, Bermúdez fue detenido por la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) por su presunta participación en la ejecución del ganadero Ponciano Vázquez Lagunes, junto a cuatro personas más. Pero su carrera policial continuó.

Inició su trayectoria en los años 90 como director de Seguridad Pública en Tabasco bajo el gobierno interino de Manuel Gurría Ordóñez (1992-1994), coincidiendo con Adán Augusto López Hernández, quien era subsecretario de Gobierno.

Posteriormente dirigió el sistema penitenciario estatal durante la gestión del priista Roberto Madrazo (1995-2000).

Gracias a su cercanía con Adán Augusto López Gobernador tabasqueño entre 2019 y 2021, Bermúdez fue nombrado Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana estatal en diciembre de 2019, y se mantuvo en el cargo hasta enero de 2024, ya con la nueva Administración de Carlos Merino Campos.

Durante su gestión como jefe policiaco fue señalado en varios informes filtrados (Guacamaya Leaks, Sedena) como "Comandante H", considerado fundador y líder de La Barredora, un grupo criminal surgido de facciones policiales que operaba actividades como extorsión, tráfico de combustible, personas y narcomenudeo en municipios como Cárdenas, Comalcalco y Huimanguillo, en Tabasco.

En la gestión de Adán Augusto López, con Bermúdez como jefe de la Policía de Tabasco, los homicidios dolosos en el estado aumentaron en un 83 por ciento.

En el inicio de una pugna entre células delincuenciales por el control criminal, principalmente el huachicol, narcomenudeo, trata de mujeres y el cobro de piso, Bermúdez fue señalado en narcomantas, desde 2020, como presunto líder de La Barredora.

Este grupo criminal se conoció por primera vez tras el asesinato de la familia del suboficial Melquisedec Angulo Córdova en Tabasco, en represalia por su participación en el operativo de la Marina que abatió a Arturo Beltrán Leyva en 2009.

Según fuentes de seguridad, La Barredora es una escisión del Cártel de los Beltrán Leyva, surgida tras la captura de Édgar Valdez "La Barbie" en 2010, y cuyo brazo armado era conocido como el "Comando de la Muerte", activo en varios estados hasta al menos 2020.

Sin embargo, este grupo también tuvo un vínculo con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), al que después le declaró una guerra en todo Tabasco, principalmente con Bermúdez al frente de la banda criminal.

En noviembre de 2023, Bermúdez negó públicamente la existencia real de La Barredora, argumentando que sólo era una firma en mantas sin estructura criminal concreta.

Sin embargo, labores de Inteligencia del Ejército mexicano ya lo identificaba desde 2019 como responsable de ordenar asesinatos y operar La Barredora bajo el mando del CJNG.
Guacamaya Leaks incluyó decenas de correos y documentos militares clasificados entre 2019 y 2022 en los que se menciona a Bermúdez bajo el alias de "Comandante H", identificado como líder de la célula criminal La Barredora.

Los reportes internos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y la Sedena señalaban que operaba una red de expolicías y mandos estatales coludidos para cometer delitos como huachicoleo, extorsión, tráfico de personas y armas en la región de la Chontalpa (en municipios como Huimanguillo y Cárdenas).

Se mencionan al menos 30 informes militares entre diciembre de 2019 y marzo de 2022, incluyendo diagnósticos sobre cooptación institucional, ejecuciones y participación conjunta de Bermúdez con otros operativos criminales.

El reporte refiere que ya desde 2019 era investigado por extorsión, huachicol, narcotráfico, tráfico de personas (migrantes y mujeres para trata).

El 14 de febrero de 2025 se giró en su contra una orden de aprehensión. Sin embargo, Bermúdez ya había abandonado México: salió del país el 26 de enero y viajó por Mérida, Panamá, Madrid y finalmente llegó a Brasilia.

Interpol emitió una ficha roja para su ubicación y detención, solicitando colaboración internacional de más de 190 países.

Fuentes de seguridad informaron que existe un desconocimiento público de su paradero.
"Lo que sí es evidente es que primero se fuga y después viene la orden de aprehensión, es más que evidente el encubrimiento", dijo a REFORMA un mando de la Guardia Nacional desplegado en Villahermosa.

NECESITAMOS A ALGUIEN DE ESE PERFIL.- ADÁN

En diciembre de 2019 se reportó en Tabasco el tercer cambio en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de la Administración de Adán Augusto López.

Hernán Bermúdez Requena tomó protesta como nuevo titular, en sustitución de Ángel Mario Balcázar Martínez, quien presentó su renuncia por motivos "estrictamente personales".

El Mandatario Adán Augusto López afirmó en ese entonces que la estrategia de seguridad "debe irse reforzando y a veces replanteándose, ya que el problema de inseguridad no se va a resolver de la noche a la mañana".

Anunció que con la llegada de Bermúdez a la SSPC, se implementaría un operativo especial para garantizar la seguridad de la población por las fiestas decembrinas.

López Hernández aseveró que, quien previamente fue director de investigación en la Fiscalía General del Estado (FGE), tenía experiencia en el ramo de la seguridad.

"Vamos a reforzar los trabajos de prevención, ahora en este mes de diciembre, yo ya lo había adelantado: vamos a iniciar un operativo especial, a partir del jueves, para tratar de abatir la incidencia delincuencial. Este mes hay circulante, entonces vamos a cuidar el patrimonio de los tabasqueños", dijo el Gobernador morenista.

Puntualizó a medios locales que Balcázar cumplió su ciclo y, por motivos personales, le presentó la renuncia, a cinco meses de haber relevado a Jorge Alberto Aguirre Carbajal, por lo que decidió invitar a Bermúdez.

"Es una gente que conoce la Secretaría, ya estuvo en alguna época, cuando era dirección de Seguridad Pública, y había venido trabajando muy bien en el área de investigaciones en la Fiscalía y creo en estos momentos que requerimos a alguien con ese perfil", reiteró el morenista.

"En un año hemos logrado disminuir la incidencia delincuencial y se tienen que fortalecer los trabajos", presumió.

UN MANDO INCRUSTADO EN MORENA

Los vínculos de Hernán Bermúdez Requena con el crimen organizado eran un secreto a voces en Tabasco.

A pesar de la información filtrada y de los reportes de inteligencia de Sedena y el CNI, las acusaciones fueron minimizadas, lamenta Lorena Bourregard, ex candidata a Gobernadora de "Fuerza y Corazón por Tabasco" (PAN-PRI).

"La actitud recurrente de Morena ha sido la negación total ante escándalos de esta naturaleza, la falta de pronunciamientos por parte de figuras como el hoy senador Adán Augusto López y la Presidenta Claudia Sheinbaum es muy cuestionable", dice a REFORMA, Bourregard.

"La actual Mandataria federal negó recientemente vínculos entre Bermúdez y López Hernández, pero los cuestionamientos apuntan a la responsabilidad de los gobernantes en la designación de funcionarios clave. Un Presidente está informado de todo, como decía Andrés Manuel López Obrador, en este caso la Presidenta debe estar informada de todo, por lo que la omisión se interpreta como una evasión de responsabilidades institucionales", acusa la ex diputada.

"Hay una secuela, hoy hay ejecutados todos los días", reprocha.

"Este hecho ha desatado nuevas críticas por la falta de filtros en la selección de responsables políticos en zonas con alto valor estratégico. Las afirmaciones del dirigente estatal de Morena, quien asegura que Bermúdez no era militante del partido, fueron desmentidas mediante registros del INE y evidencias fotográficas donde aparece con Claudia Sheinbaum en actos oficiales. Inclusive, se le identifica portando gafete como asesor en un evento en el Zócalo capitalino", reclama Bourregard.

"Decir que no sabían no es creíble (...) nombraron a Bermúdez, lo respaldaron y lo defendieron", señala la ex candidata.

A este contexto, dice, se suma el caso de un exfuncionario de seguridad en el Municipio de Cárdenas -presuntamente amenazado por el crimen- que ahora se desempeña como coordinador electoral de Morena en esa misma localidad.

Se trata de Fernando Lopez, ex subdirector de Seguridad Pública de esa localidad y ahora coordinador de Afiliación de Morena en el segundo distrito electoral, que comprende Cárdenas y Huimanguillo.

Cuando fue subdirector de Seguridad Pública en Cárdenas, fue denunciado en narcomantas de proteger a un grupo criminal y desde que renunció ha seguido cerca de Morena, sin ser investigado por esos supuestos nexos, alertaron fuentes de seguridad en Tabasco.

BALACERAS, CAOS Y 'PASOS EN LA AZOTEA'

En diciembre de 2023, en plena temporada navideña, Tabasco comenzó a resentir una racha de violencia, zozobra de la población, inacción de autoridades estatales y unas fuerzas armadas confundidas.

"Los 'buenos' actuaban como malos", recordó un mando militar que estuvo desplegado en el estado en ese año.

Desde el 22 de diciembre de 2023 se registraron en Villahermosa hechos violentos que paralizaron la ciudad y otros municipios, debido a que se reportaron una serie de persecuciones y balaceras entre dos presuntos grupos antagónicos que peleaban la plaza.

Las refriegas se extendieron hasta los penales de Huimanguillo y Villahermosa, donde se reportaron dos personas muertas y tres más heridas, al parecer derivado de motines.
Uno de los grupos que participaron en los desmanes, La Barredora, en ese entonces ya en ruptura con el CJNG, acusó "incumplimientos" de las autoridades estatales, de acuerdo con información obtenida por la Guardia Nacional.

Esa violencia llegó a las inmediaciones de la casa del Jefe de la Policía del estado Hernán Bermúdez, en donde se reportaron tiroteos, en la zona del Fraccionamiento Tabasco 2000.

Bermúdez descartó un ataque a su familia o su persona.

Respecto a los autores de los "actos vandálicos", señaló que se trataba de grupos locales que mantenían disputas entre ellos. Aseveró que no había presencia de un cártel formal, pero que algunas células se siglaban con letras de cárteles como el Jalisco Nueva Generación, sin realmente pertenecer a ese grupo.

Se aferró a sostener que en Tabasco no existía el crimen organizado como tal y mucho menos la presencia del CJNG, que, a la postre, se supo era un grupo antagónico a "su propio grupo criminal", de acuerdo a las pesquisas.

Información del Centro Regional de Fusión de Inteligencia Sureste (Cerfise) refutó las versiones de Bermúdez, pues contaba desde 2022 con reportes de que en Tabasco existían altos funcionarios ligados con el crimen organizado.

Uno de los señalados era Bermúdez, a quien le encontraron conexiones con La Barredora, enfocada en el cobro de piso, huachicol y narcomenudeo.

Fuentes de la Guardia Nacional indicaron a Grupo REFORMA que las investigaciones estaban detenidas debido a que el mando policial tenía "influencia política".

"Sí opera el CJNG en Tabasco, eso lo tenemos registrado", indicó la fuente.

Por separado, fuentes militares indicaron que, en el caos del 22 de diciembre, las autoridades estatales no informaron sobre los motivos de los ataques, por lo que actuaron por cuenta propia.

"Cerraron la comunicación, querían a los elementos en los penales, luego que en varios puntos de la ciudad, en momentos estuvieron en medio de la nada, porque no había tareas definidas, sólo reaccionar a la violencia", dijo a REFORMA un capitán que supo de estos hechos.

Este mando contabilizó ese día de diciembre 15 autos calcinados que fueron incendiados, además de nueve balaceras en distintos puntos de Villahermosa, varias de ellas desde autos en movimiento.

También se reportó vandalismo en una gasolinera, daños a viviendas y el cierre de negocios.
"Los ataques fueron contra las autoridades estatales, situación que afectó a civiles", añadió.

Tras la quema de vehículos, narcobloqueos, balaceras y motines en penales, el Gobierno de Tabasco aseguró que hubo una "reacción inmediata, coordinada y eficaz".

La cadena de confrontaciones dejó un saldo de dos muertos, confirmó el entonces Secretario de Seguridad, Bermúdez Requena.

FICHADO DESDE 2006

En 2006, Hernán Bermúdez fue detenido por la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) por su presunta participación en la ejecución del ganadero Ponciano Vázquez Lagunes, hermano de Cirilo Vázquez Lagunes, llamado "El Cacique del Sur" por su influencia en esa región de Veracruz, limítrofe con Tabasco.

En ese entonces se indicó que la ejecución tuvo que ver con el asesinato del Alcalde perredista de Huimanguillo, Walter Herrera Ramírez, un caso que no fue aclarado.

Ponciano y cuatro personas más fueron "levantadas" por un comandado de pistoleros que supuestamente usaban uniformes de la SIEDO. Aparecieron con el tiro de gracia.

Cirilo Vázquez organizó ruedas de prensa en Acayucan y Villahermosa para denunciar que Ponciano había sido asesinado por razones políticas y acusó a funcionarios del Gobierno de Tabasco por el multihomicidio.

Responsabilizó al entonces subsecretario de Protección Civil y Readaptación Social del Gobierno de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena.

Según versiones de autoridades locales, Cirilo Vázquez declaró que Bermúdez le aseguró que agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) detuvieron a Ponciano, pero no le creyó y lo denunció.

El lunes 12 de junio de 2006 agentes de la AFI detuvieron a Bermúdez y lo trasladaron a la Ciudad de México, donde lo tuvieron en calidad de arraigado en la Colonia Doctores.

Pero salió libre en unos días después.

Cinco meses más tarde, en noviembre, Cirilo también fue asesinado, en Acayucan, Veracruz.

El ranchero y cacique fue emboscado cuando volvía a su casa de un partido de beisbol semiprofesional.

Los sicarios le dispararon al menos 12 veces, tres en la cabeza.