Veracruz.- Plata o plomo. El crimen organizado en Veracruz asesinó a la taxista y maestra jubilada Irma Hernández Cruz, de 62 años, para poner "ejemplo" de lo que le pasa a quien se niega a pagar extorsión.

Previamente fue videograbada y obligada a dirigir un mensaje a la población veracruzana para que pagaran las extorsiones a los grupos criminales.

Irma Hernández fue secuestrada por un comando armado el 18 de julio en su natal Álamo Tamapache, al norte del Estado; rodeada por una docena de encapuchados que le apuntaban con armas largas, la mujer fue obligada a hincarse y hablar ante una cámara que la grababa.

"Mi nombre es Irma Hernández Cruz, manejo el taxi 554", dijo en el video.

"Compañeros taxistas, con la mafia veracruzana no se juega, paguen su cuota como debe de ser con ellos y dejen de andar con los charros (sindicatos), que sólo los extorsionan, o van a terminar como yo".

La víctima fue plagiada a plena luz del día frente al Mercado Municipal, ante pobladores que quedaron paralizados por la acción de los sujetos armados, presuntamente ligados a las "Fuerzas Especiales del Cártel Mafia Veracruzana".

Ese día renunció el director de Seguridad Pública de Álamo, el capitán Raúl Saucedo Cisneros.

El cuerpo sin vida de la mujer taxista fue localizado ayer en un rancho a 40 kilómetros de Tuxpan, la cabecera municipal.

No sólo los taxistas, decenas de comerciantes y propietarios de negocios, han denunciado la amenaza de plata o plomo.

La acusación es sobre el Grupo Sombra, que se escindió del Cártel del Golfo en el 2017 y que desde el 2024 se autodenomina La Mafia Veracruzana.

Irma Hernández era propietaria de dos taxis adscritas al sitio Ejido Estero del Ídolo.

La Gobernadora Rocío Nahle declaró que, por razones de seguridad, no se ofrecerían detalles del caso, pero que la carpeta de investigación ya fue judicializada.

Vecinos han denunciado desde hace tiempo la presencia de células criminales que operan con impunidad en la zona. El centro del municipio, que solía ser bullicioso y familiar, se ha ido transformando en un escenario de miedo, silencioso por el crimen y las extorsiones.

Según registros militares, La Mafia Veracruzana opera en los límites con Tamaulipas y San Luis Potosí