Aunque era Fernando Robleño, el torero madrileño que había anunciado su adiós de los ruedos en la última corrida de este año en Madrid, la sorpresa y la noticia es que, súbitamente, una de las figuras más importantes del toreo "Morante de la Puebla" se quitó la colera, tras haber hecho una faena excepcional de arte y calidad por la que cortó dos orejas.
Se fue a los medios de la plaza y sin que nadie lo presintiera siquiera, se quitó la coleta, en señal de retiro del toreo.
"Fue un momento único, que nadie esperábamos. Místico como es él, caminó a los medios del ruedo de Madrid, con lo que todo ello conlleva, y cuando creímos que agradecería la ovación, se desprendió el añadido en un trance místico, sin Ripley de testigo", contó desde la propia plaza productor musical y cultural Marco Antonio Lugo, vía telefónica.
Histórico entonces fue este último festejo del 2025 en Madrid, donde José Antonio Camacho "Morante de la Puebla" había conseguido su última alternativa al novillero Sergio Rodríguez, y luego de torear a su primero, segundo de la tarde de la ganadería de Garcigrande, salió al cuarto que le dio un tremendo revolcón cuando toreaba de capote.
Adolorido visiblemente se fue ya con la muleta hacia "Tripulante", número 102 y con 554 kilogramos, nacido en enero de 2021, que, sin saberlo, sería el último toro de su carrera.
Los muletazos hondos, templados, acompasando una noble embestida del astado que, parecía saber que tenía que hacer lucir a "Morante" porque era la última tarde de su carrera.
El público no quería que matara, sin embargo, José Antonio se fue por derecho y dejó un estoconazo perfecto y fulminante que le dio entonces al público la posibilidad de solicitar las dos orejas y tras esa vuelta al ruedo, vino el histórico, melancólico momento del adiós de un torero que, sorprendió, como siempre lo hizo con su tauromaquia, a la misma historia.
Fernando Robleño que sí había anunciado su retiro esta tarde realizó una soberbia labor con el último toro de su importante trayectoria que lo hace un torero consentido de Las Ventas, pero falló al oficiar con la espada y sólo pudo cortar una merecida oreja.
La corrida aún no termina, pero es de suponer la hecatombe que habrá a la salida de la plaza en la Puerta Grande por ser parte de un histórico e irrepetible momento, la última vez que se verá a José Antonio Camacho "Morante de la Puebla" salir por ahí vistiendo de malva (lila) y oro, como lo hizo "Antoñete" en cuya memoria el propio "Morante" organizó esta mañana un festival donde los legendarios y clásicos Curro Vázquez y César Rincón el colombiano más importante de la historia del toreo, cortaron dos orejas y en el que actuó también el de La Puebla del Río.