Chris Young, quien recientemente fue un funcionario político en PhRMA, una asociación comercial de la industria farmacéutica que realiza cuestiones de organización de las bases, se unió al equipo de Musk, de acuerdo a tres personas enterados de esa medida, que hablaron de manera anónima.
La contratación refleja un enfoque menos extravagante de la participación política para Musk.
El dirigente de Tesla, X y SpaceX ha sido un político voluble y un donador filantrópico durante años, frustrando a algunos miembros del movimiento conservador.
Tiene sólo una cuantas relaciones clave en Washington: Musk es particularmente cercano a Kevin McCarthy, el ex presidente de la Cámara, quien es cercano profesionalmente con Young.
Young trabajó para un grupo comercial desde el 2020 después escalar las filas de la organización de campo republicana.
Es nativo de Louisiana y empezó su carrera trabajando como organizador de campo para el ex gobernador Bobby Jindal antes de convertirse en director nacional de campo para el Comité Nacional Republicano durante el ciclo 2016.
En un tiempo, Young fue el jefe de Involucrar a Texas, una organización no lucrativa de registro de votantes del estado, financiado por importantes donadores republicanos.
La organización de campo ha sido una prioridad para Musk, a quien le agrada que Young viva en Texas, durante su reciente participación en las campañas políticas.
En cierto momento, Musk descartó en privado la publicidad en televisión y argumentó que los donadores deben financiar los programas que convenzan a los votantes, dos a la vez, para apoyar a Trump.
La función de los “donadores-asesores” es de ser porteros y consejeros, y los donadores ultra ricos usualmente los contratan cuando se están preparando para realizar significativas contribuciones políticas a largo plazo.
Parte del trabajo de Young será el servir como los ojos y oídos de Musk en la Super Pac que Musk inició pero que ha tenido cierta turbulencia.
