Austin, Texas.- El gobernador de Texas, Greg Abbott, está adoptando una postura cada vez más antagónica hacia China, al emitir una serie de advertencias y directivas esta semana contra China, incluyendo pedirle al gobierno estatal de Texas que abandone las inversiones en el país.
El riesgo financiero de las inversiones en China está aumentando debido a las "acciones beligerantes" de la nación en la región del Pacífico y en todo el mundo, dijo Abbott en una carta a los jefes de las agencias estatales de Texas. Les indicó que detuvieran las nuevas inversiones en China y se deshicieran de las inversiones existentes.
Haciéndose eco de la dura retórica de Trump contra el país, el gobernador también emitió una orden el 19 de noviembre para "endurecer los sistemas estatales" contra las naciones extranjeras hostiles, citando "las maliciosas operaciones de espionaje del Partido Comunista Chino".
Un día después, el gobernador le dijo al estado "que se prepare para posibles amenazas contra la infraestructura crítica de Texas por parte de un gobierno extranjero hostil o sus representantes", citando los peligros planteados por China.
Si bien las tenencias de Texas en China son limitadas, la declaración del gobernador avivó las preocupaciones de que algunos de los fondos estadounidenses más grandes puedan evitar invertir en el país por consideraciones políticas. Eso afectó el sentimiento del mercado el viernes, ya que las decepcionantes ganancias tecnológicas y las preocupaciones sobre el inminente regreso de Trump impulsaron una venta masiva de acciones chinas.
Abbott instruyó a Utimco, la dotación de 78 mil millones de dólares de la Universidad de Texas y la Universidad Texas A&M, para que desinvirtiera en China a principios de este año. Otros fondos estatales incluyen el Sistema de Jubilación de Maestros de Texas de 210.5 mil millones y el Sistema de Jubilación de Empleados de Texas, que administra más de 40 mil millones.
El inversionista Kyle Bass calificó la medida como "un enfoque reflexivo y estratégico para salvaguardar los intereses económicos, la seguridad nacional y la prosperidad a largo plazo de Texas". Bass pidió al gobierno de Estados Unidos que siga el ejemplo del estado.