Durante años, el gobierno chino se ha esforzado por controlar la exportación de tierras raras, un grupo de metales utilizados en toda una serie de productos tan comunes como los semiconductores y las luces. Ahora, en su guerra comercial con Estados Unidos, China está tratando de limitar aún más el mercado de estos metales, lo que podría tener consecuencias desastrosas para la fabricación y el poder militar estadounidenses. Entonces, ¿qué son exactamente estos metales y por qué son tan importantes?
¿Qué son las tierras raras?
Hay 17 tipos de metales conocidos como tierras raras, que se extienden por toda la tabla periódica y son cruciales para industrias como la tecnología, la energía y el transporte. Con nombres como terbio, praseodimio y disprosio, estos metales son ingredientes importantes de algunas de las tecnologías más avanzadas.
Las tierras raras pueden clasificarse en dos tipos: pesadas y ligeras. Las tierras raras pesadas tienen un mayor peso atómico y suelen ser menos comunes, lo que significa que se venden en cantidades más pequeñas y son propensas a la escasez. Las ligeras, en cambio, tienen un peso atómico menor. Los dos más importantes son el neodimio y el praseodimio, que se utilizan principalmente para crear imanes.
¿Para qué se utilizan?
Los usos de las tierras raras son amplios: chips semiconductores que impulsan la inteligencia artificial, los motores de los vehículos eléctricos, aviones de combate y misiles teledirigidos utilizados por el ejército estadounidense, turbinas eólicas y luces LED que se encuentran en millones de hogares, entre otros.
Muchas tierras raras tienen propiedades químicas que las hacen resistentes al calor, por lo que pueden utilizarse para crear imanes, vidrio, luces y baterías de alta calidad. Los imanes fabricados con tierras raras son mucho más potentes —y valiosos— que otros tipos, especialmente en la producción de coches eléctricos.
¿Estados Unidos produce tierras raras?
Estados Unidos solo tiene una mina de tierras raras operativa, en Mountain Pass, California, que produce alrededor del 15 por ciento de las tierras raras del mundo.
No siempre fue así. En la década de 1980, Estados Unidos era líder en la producción de tierras raras, con alrededor de un tercio del mercado mundial. Pero, paralelamente al esfuerzo de décadas de China por hacerse con el control del mercado, la cuota de producción de tierras raras en Estados Unidos disminuyó lentamente hasta casi desaparecer a principios de la década de 2000.
¿De dónde proceden las tierras raras?
Las tierras raras se extraen de depósitos rocosos de la corteza terrestre. Con casi el 70 por ciento del mercado, China puede controlar la exportación y el precio de los metales que se venden en todo el mundo. Alrededor del 90 por ciento de los imanes de tierras raras se producen en China, y el 99,9 por ciento del disprosio del mundo, que el fabricante de chips Nvidia utiliza para crear condensadores, se extrae en China.
En los últimos años, las tierras raras se han convertido en una herramienta geopolítica cada vez más importante. El gobierno de Donald Trump ha intentado negociar un acuerdo para adquirir las tierras raras de Ucrania, rica en minerales, a cambio de apoyo militar. Su gobierno también ha hablado de una adquisición total de Groenlandia, en parte debido a su rico suministro de tierras raras.
¿Cuál será el impacto de las restricciones de China sobre las tierras raras?
Sin un suministro adecuado de tierras raras, la fabricación estadounidense en sectores como el automotriz se paralizaría. Algunas empresas estadounidenses llevan años almacenando tierras raras en previsión de una guerra comercial, pero no está claro cuánto durarían esos suministros si China cortara las exportaciones.
También podría afectar a los objetivos estratégicos del ejército estadounidense, que sin tierras raras podría acabar con escasez de drones, misiles y aviones. Los fabricantes de tecnología como Nvidia, cuyos chips ya escasean, también podrían verse afectados, junto con fabricantes de celulares como Apple.
Aunque muchas explotaciones mineras de tierras raras en China fueron durante años privadas o incluso de propiedad extranjera, el gobierno chino ha consolidado el control de la industria adquiriendo las mayores mineras locales con empresas estatales, lo que le da un control total sobre la fabricación y la exportación.