Chihuahua, Chih.- Este 24 de diciembre, las familias de Chihuahua se preparan para celebrar la Nochebuena, una de las fechas más importantes del calendario cristiano, en la que se conmemora el nacimiento de Jesús y se fortalece la unión familiar.
La Nochebuena representa un momento de esperanza, paz y reflexión. Para la Iglesia Católica, el nacimiento de Jesús simboliza la llegada del amor de Dios al mundo, un mensaje que invita a la solidaridad, la humildad y el perdón.
Estos valores que se reflejan en los hogares chihuahuenses al reunirse alrededor de la mesa para compartir la cena antes de la medianoche.
En muchos hogares, el pesebre o nacimiento ocupa un lugar central, con figuras de José, María y el Niño Jesús, recuerdan el relato bíblico y enseñan a los más jóvenes valores como la fe y la sencillez.
El árbol de Navidad, decorado con luces y esferas, representa la vida, la alegría y la esperanza que iluminan incluso los momentos difíciles. Las calles y plazas también se llenan de luces y nacimientos que las familias visitan antes de regresar a casa.
En la colonia Dale, la familia Hernández López se alista para una de las cenas más grandes de la zona. Con más de veinte personas entre abuelos, hijos, nietos y primos, la mesa se llena de platillos típicos de Chihuahua para Noche Buena. Entre las delicias que prepararán están pavo horneado, pierna de cerdo y tamales recién hechos, acompañados de champurrado y ponche navideño, además del postre de manzana y buñuelos para cerrar la velada.
“Lo más importante no es la comida, sino estar juntos y compartir estos momentos”, dice Carmen, la abuela de la familia.
Comenta que. entre risas y aromas de la cocina, la familia pasa la noche conversando sobre recuerdos de celebraciones pasadas y los deseos para el año que viene.
En contraste, en la colonia Aeropuerto, Valeria y Diego celebrarán su primera Nochebuena sin sus padres. Por motivos laborales, estos no pudieron visitar Chihuahua desde Nuevo Casas Grandes y Ciudad Juárez, pero los hermanos decidieron mantener vivas las tradiciones y prepararán pavo horneado, tamales y champurrado, siguiendo las recetas familiares.
“Extrañamos a nuestras familias, pero cocinar y cenar juntos nos hace sentir que están cerca”, comenta Valeria. Antes de la medianoche, planean encender una vela junto al pesebre, orar y hacer una videollamada con sus padres para compartir buenos deseos.
En otras colonias de la ciudad, algunas familias optan por invitar a vecinos o personas que pasarán la noche solas, resaltando que compartir la cena significa ofrecer compañía y solidaridad.
Entre las tradiciones de esta celebración, se encuentran la oración familiar antes de la medianoche, el arrullo del Niño Dios, cuando se coloca la figura del Niño Jesús en el pesebre cerca de la medianoche, y, para quienes lo desean, la asistencia a la Misa de Gallo en las iglesias locales. Después de la cena, muchos comparten postres de manzana, buñuelos y ponche caliente, la celebración se prolonga hasta la medianoche, hora en la que muchas familias abren los obsequios que se hicieron entre ellos mismos.
El 25 de diciembre, día en que se celebra la Navidad, los integrantes más pequeños despiertan con los regalos que pidieron a Santaclós, para cerrar la tradición navideña con alegría y sorpresa.