El estacionamiento del edificio del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJ) fue cerrado para reparar los derrumbes de material que pudieran causar daños en vehículos o maquinaria, según explicó la presidenta del Poder Judicial, Myriam Hernández.
De acuerdo con fuentes extraoficiales, tras una revisión técnica, descubrieron que una de las principales trabes está dañada y con riesgo de colapso.
Este problema pertenece a una serie de fallas que ha tenido el edificio relacionadas con su estructura, como las inundaciones de noviembre de 2017 y septiembre de 2018, por afectaciones en las tuberías e incluso los desperfectos de las líneas han estado relacionados por el paso de camiones pesados en las calles que lo rodean.
El Centro de Justicia de esta capital fue inaugurado hace casi 10 años, el 30 de octubre de 2015, pero entró en funciones plenamente hasta el primer bimestre de 2016, por lo que cumple este 2025 nueve años de operaciones.
Desde los primeros días el inmueble tuvo problemas. A pocas semanas de su apertura presentó deficiencias en su construcción, las primeras estuvieron relacionadas con fugas de agua en el interior de varias salas, incluso reventaron una de las líneas del sistema contra incendios en uno de los pisos superiores.
En diciembre de 2015 cuatro ventanales del séptimo piso se desprendieron de su lugar y cayeron, lo que fue atribuido a los trabajos de limpieza, pero en febrero de 2016 hubo otra situación con los vidrios, al reventarse varios de los que están ubicados en la torre norte, esto por la presión del edificio sobre las estructuras de las ventanas.
En junio de 2016 nuevamente hubo inundaciones en el recinto por daños en las tuberías de agua en varios pisos, lo que ocasionó daños en los plafones de los techos que colapsaron al encontrarse húmedos. Unas semanas después hubo otra inundación en varias salas y oficinas.
Un peritaje arrojó que las constantes inundaciones ocurrían porque el suelo tenía hundimientos, ya que es una zona cercana al cauce del río San Pedro y del Chuvíscar. Las inundaciones volvieron en 2017 y 2018 en varios eventos. Desde entonces los desperfectos han sido esporádicos respecto a las tuberías.
En lo que respecta a las obras que son realizadas actualmente, en un video que fue difundido en redes sociales pudo verse como parte de los enjarres de las paredes se desprendieron, además de las cuarteaduras en partes de la estructura, por lo que desde septiembre comenzaron los trabajos de reparación.
La presidenta del Poder Judicial comentó que las obras son para evitar que vayan a darse daños a personas, vehículos o equipo en los sótanos por más desprendimientos de material.
Una de las consecuencias de la debilidad de parte del edificio es que en la explanada principal no es posible edificar ninguna construcción, ya que no soporta carga extra.
En el proyecto fueron varias las compañías que participaron, la empresa Ingeniería y Diseño
Van S.A de C.V, fue la encargada de construir la torre sur, norte, el edificio central, la plaza y sótanos de la Ciudad Judicial.
También fueron contratadas las empresas Afirma Inmobiliaria S.A de C.V.; Arve Constructora S.A de C.V. y a título personal, Jorge Arturo Moreno. Todas se encargaron de la construcción de los edificios de la Ciudad Judicial, el patio y el sótano. La empresa Laboratorio y Consultoría estuvo en la supervisión y control de calidad, además de que fue incluida la empresa Urbanissa.