Chihuahua.- El racismo y la falta de oportunidades laborales, que cada vez son más evidentes en Estados Unidos tras la llegada de Donald Trump a la presidencia, han provocado que cada vez un mayor número de migrantes, residentes y ciudadanos norteamericanos volteen a ver a México como una oportunidad de negocio.
Tal es el caso de Lizeth Cuara, empresaria mexico-americana nacida en Los Ángeles, California, e hija de inmigrantes, quien aseguró ha experimentado en carne propia las desigualdades sociales.
Una experiencia traumática que vivió al dar a luz, que casi le costó la vida, es lo que dijo que la motivó para crear una línea de productos que apoyarán en la recuperación segura y natural de las madres después del parto.
“Aunque tú seas nacida en Estados Unidos, aunque tu inglés sea del mejor, tus puestos, tu salario está basado en cómo te ves; acá lo llaman Corporate America, lo que viene siendo trabajar en empresas y es muy racista. Ya tenía yo años trabajando, un día me ofrecieron un aumento, se me hizo muy poquito para los años que llevaba yo allí y dije 'no, ya no están dando el valor que me debo dar a mí misma'. No querían que me fuera, me dijeron que me quedara, no quise y dije '¿qué voy a hacer ahora?, ¿cómo le voy a hacer?', así que empecé a vender productos por ebay”, compartió la empresaria.
Ese fue el inicio de una empresa exitosa, así como de la creación de una red de mujeres que vivieron la misma experiencia después de dar a luz. La emprendedora afirmó que creció en una familia con pocos recursos y debido a su estatus migratorio no pudo terminar la escuela secundaria.
Aseguró que por ser latina no calificaba para muchos trabajos, sus oportunidades eran limitadas y que a pesar de ser bilingüe le pagaban menos que a otros empleados. “Nos pagan menos, aunque seamos bilingües, y nos dan menos oportunidades en todos los sentidos”.
Ahora, con su marca 'Misty Phases' ofrece ropa interior, fajas postparto, cremas, aceites y baños de hierbas esenciales. Su iniciativa encontró un nicho en el mercado mexicano, y las redes sociales, especialmente Tiktok, jugaron un papel crucial en su éxito.
Lizeth explicó que sus videos son virales constantemente y han alcanzado entre uno y 6 millones de visualizaciones. Compartió que la promoción en la plataforma digital permitió que su idea creciera rápidamente, y que las madres mexicanas comenzaron a adquirir sus productos e incluso pagan hasta 65 dólares en costos de envío para recibirlos desde los Estados Unidos.
Comentó que, gracias a su nacionalización mexicana, pudo establecer su proyecto en el país de origen de sus padres. Dijo que las ventas para el mercado mexicano alcanzaron los 100 mil dólares en enero de 2025, y espera que el total supere el millón de dólares.
Lizeth, dijo que se considera un ejemplo de perseverancia y lucha, por ello envió un mensaje a los migrantes indocumentados, "hay vida, una buena vida fuera de los Estados Unidos".