Washington.- Líderes de las más influyentes compañías de Estados Unidos pidieron ayer a la Administración Trump renovar en 2026 el T-MEC, pero presionar para que las empresas sean protegidas ante lo que denominaron politización del Poder Judicial en México, que pone en riesgo arbitrajes independientes frente a "caprichos políticos".
Agrupados en la Business Roundtable (BRT) -asociación que congrega a unos 200 CEOs como Tim Cook, de Apple; Jamie Dimon, del banco JPMorganChase; Mary Barra, de la automotriz GM, y Raj Subramaniam, de la empresa de envíos FedEx- pidieron frenar lo que llamaron discriminación del Gobierno mexicano en los sectores de energía, telecomunicaciones, aviación y servicios de paquetería.
En energía, por favorecer a Pemex y la CFE; en telecomunicaciones por privilegiar a Telmex de Carlos Slim; en aviación por proteger a Mexicana, y evitar que los servicios de carga puedan hacerse en el AICM; y en paquetería, por obligar a empresas extranjeras a tener licencias de correos y proteger al servicio postal mexicano.
La BRT dijo tener serias preocupaciones sobre acciones del Gobierno mexicano que ponen en peligro las inversiones de empresas estadounidenses, contradicen las obligaciones del T-MEC y obstaculizan el comercio transfronterizo en sectores clave.
"Las recientes reformas judiciales de México, incluyendo los esfuerzos por eliminar a los reguladores independientes, afectarán negativamente el clima de inversión en el País. Bajo estas reformas, México será el único país del mundo donde todos sus jueces serán elegidos por voto popular, lo que genera preocupación de que las disputas entre inversionistas privados y el Gobierno se vean sujetas a consideraciones políticas en lugar del Estado de Derecho", dijeron los CEOs en un documento presentado en el marco de las consultas públicas rumbo a la revisión del T-MEC que inicia en julio de 2026.
"Para mitigar el riesgo que representa la politización del Poder Judicial, la BRT recomienda enfáticamente que la Oficina del Representante Comercial (USTR, en inglés) considere restaurar el Mecanismo de Solución de Disputas Inversionista-Estado (ISDS, en inglés) dentro del T-MEC con México", indicaron.
A diferencia del tratado que le antecedió (conocido como TLCAN) y que estuvo vigente hasta 2020, las protecciones bajo el Mecanismo ISDS del T-MEC redujeron el tipo de reclamos que inversionistas de EU pueden presentar al Estado mexicano.
"Si el Mecanismo ISDS con México es restaurado (en el T-MEC), los inversionistas de EU tendrán la opción de resolver sus quejas a través de árbitros independientes. La mera existencia del Mecanismo ISDS probablemente haría reflexionar a aquellas figuras políticas (en México) que estén considerando la expropiación o presionando a los tribunales para que cedan a los caprichos políticos", dijo la agrupación.
"En los últimos cinco años, México ha tomado varias medidas preocupantes que han afectado negativamente las inversiones estadounidenses en el País, como la expropiación de una cantera propiedad de una empresa estadounidense y la imposición de impuestos retroactivos a las aseguradoras", dijeron.
Además cuestionaron a la Cofepris, organismo que calificaron de "inconsistente" en sus normas regulatorias que afectan a productos médicos y biológicos estadounidenses.
Advertencias
Algunas de las advertencias de los CEOs estadounidenses sobre México:
-Reforma judicial: Socava clima de inversión y el Estado de Derecho.
-Derechos del inversor: Restaurar la Solución de Controversias entre Inversor y Estado (ISDS).
-Barreras digitales: Regulaciones que restringen el comercio digital en violación del T-MEC.
-Prácticas fiscales injustas: El SAT ataca a las empresas multinacionales con auditorías y evaluaciones poco razonables.
-Discriminación a favor de empresas estatales: Protección a Pemex, CFE y Mexicana de Aviación.
-Autoridades regulatorias inconsistentes: La Cofepris carece de un enfoque regulatorio consistente, lo que demora productos de EU.