La situación problemática en que ha metido al continente Americano, y al MUNDO ENTERO con su régimen político, recién iniciado, el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump; además de, seguramente, preocupar y ocupar a la mayoría de los presidentes y jefes de Estado, a los mandatarios y gobernantes en general; al resto de los ciudadanos que habitamos el Globo Terráqueo, interesados en la cosa pública, en el desarrollo y crecimiento de nuestras economías, nos lleva a pensar, esperar y desear: el gran logro que tendría la HUMANIDAD si realmente se estableciera la PAZ y ENTENDIMIENTO entre todos los SERES HUMANOS, y se derribaran las fronteras entre los Estados-Nación, entre todos los países de los cinco continentes que conforman el PLANETA TIERRA.
Se creyó y se tuvo confianza, en que después de la Segunda Guerra Mundial, con la creación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), fundada en 1945, instituida sobre la base de la unificación voluntaria de los esfuerzos de los Estados soberanos CON EL OBJETO DE MANTENER Y FORTALECER LA PAZ Y LA SEGURIDAD INTERNACIONALES, ASÍ COMO DESARROLLAR LA COOPERACIÓN PACÍFICA ENTRE LOS ESTADOS-NACIÓN.
No obstante, el “gozo se fue al pozo”. El optimismo y esperanza de millones y millones de hombres y mujeres de “buena voluntad”, desde los inicios de la segunda mitad del S. XX hasta lo que va del S. XXI –lógicamente, de los que aún viven o vivimos-, esos buenos deseos de convivir evidentemente un ESTADO DE PAZ y ENTENDIMIENTO ENTRE LOS PUEBLOS, se ha frustrado.
Lo que explica entonces, la búsqueda de mejores condiciones de vida; que, por ende, ha generado la ola de millones de migrantes de país a país dentro de un mismo continente, o de continente a continente, de océano a océano.
Presentándose paralelamente, dos fenómenos étnicos, sociológicos y económicos: la aculturación y/o el malinchismo. Cuyo respectivo significado es el siguiente:
ACULTURACIÓN. “(la partícula a no es de negación; este término procede de ad-culturación, es decir, paso de elementos de una cultura a otra […] En la actualidad, se utiliza para designar toda adaptación cultural consecutiva a un cambio de medio: geográfico, económico, social o profesional”. (Diccionario de Psicología Larousse).
MALINCHISTA. Dícese del individuo que da preferencia a las personas, a las costumbres, a las cosas extranjeras y desprecia las nacionales, o adopta una actitud servil frente a los extranjeros”. (Diccionario enciclopédico Larousse).
El anotar las dos definiciones, va en razón de las amenazas y retos que (¿cómo blof?) insiste en hacer el presidente Trump, y la respuesta que están presentando en primer lugar los CONNACIONALES migrantes en los USA, y los pueblos de los EUM, del resto de Latinoamérica y del Caribe, impregnada de justa reacción PATRÓTICA y NACIONALISTA. Lo que enaltece, salvo algunos lamentables y acomplejados casos, dentro y fuera de nuestras fronteras, el orgullo de haber nacido en la PATRIA y MATRIA MEXICANA.
Quizá, en el correcto sentido del término: Se puede practicar la aculturación, pero nuca más el vergonzoso malinchismo. En ese marco histórico-conceptual, probablemente a raíz de que México pasó a ser aliado de los USA, durante la Segunda Guerra Mundial, y paralelo a la incipiente globalización o mundialización del “libre comercio”, se haya entrado o agravado el proceso de relajación de las buenas costumbres y tradiciones de la familia mexicana; y se haya “descuidado” o desatendido en todo el sistema educativo nacional la formación e información histórica y cívica: integrales, integradoras y unificadoras de las nuevas generaciones.
En tal sentido, a partir de los años sesenta del S.XX, en todos los terrenos de la vida nacional, se deja sentir la pertinaz, la imparable influencia norteamericana, gringa: en los hábitos de la alimentación y el vestido; en el lenguaje, en el pensamiento, en los ideales de vida; en la ECONOMÍA, en la sociedad, en la ideología política y religiosa, en las artes y en la educación; en toda acción y actitud interior y hacia el exterior.
Esa influencia se ejerce, además, en un Globo Terráqueo en que el tiempo y el espacio, las distancias, ya no son limitantes; en el mundo de una prensa que ofusca, de una radio que aturde, de una TV y cine que embelesa ¿e idiotiza?; de un sistema cibernético y hoy por hoy, de una Inteligencia Artificial (IA) que aun estando las familias, las personas reunidas bajo el mismo techo o en el mismo espacio, están “desintegradas”.
Tiempos (¿hasta hoy?), en que el “Tío Sam”, el Pentágono, bíblicamente se creían y pensaban omnipresentes y omnipotentes. Afortunadamente para el logro de la PAZ y la cooperación internacional, los EE.UU., ya no son ni la gran potencia, ni la única. Ni todo el dinero del universo está en sus bancos; ni todo el conocimiento, ni toda la ciencia, la técnica y la tecnología son de su propiedad o están bajo su control.
Con respecto a la GLOBALIZACIÓN, Régis Debray, la considera “un AMERICANISMO caracterizado por la superficialidad, la estandarización, el predominio de los medios de comunicación de masas y la nivelación cultural ‘por lo bajo’. La COCA-COLONIZACIÓN del mundo aparece como la nota dominante de una cultura material y del consumo a la cual resulta ajeno ‘cualquier tipo de excelencia intelectual o moral’”. (José Luis Orozco y Consuelo Dávila, “Breviario político de la globalización”, Fontamara, UNAM, 1997).
¡Vaya, Mr. Trump! Con su geopolítica y geoeconomía que quiere imponer no sólo perjudica a la humanidad entera, sino a su propio pueblo. Para colmo: hace a un lado la globalización neoliberal y restablece la AUTARQUÍA.
Que consiste “en la política de aislamiento económico de un país respecto a la economía de los demás países, constituyendo una tendencia a crear un circuito económico cerrado. Limitando la importación de mercancías procedentes de otros países, pero al mismo tiempo, ampliando por todos los medios la exportación de sus productos y de capital financiero a otros países”. (Borísov, Zhamin y Makárova, “Diccionario de Economía Política”, Ed. Pueblos Unidos, Uruguay).
¿De veras, es tan avasalladora, como parece, la influencia norteamericana? ¿Usted, en cuál de las dos variables: aculturación/malinchismo, se insertaría?
Opinión
Jueves 06 Feb 2025, 06:30
Aculturación y/o malinchismo
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Isaías Orozco Gómez
![Aculturación y/o malinchismo](https://www.eldiariodechihuahua.mx/core/dch/assets/images/2025/02/05/isaias-orozco-WCXVEATqk.jpg)