Ciudad de México.-Don Ataúlfo le dijo a su mujer: "Ahí va la nueva vecina, tan guapa ella, tan frondosa. Seguramente va de compras'". La señora se asomó por la ventana, observó a la chica y declaró: "Viendo cómo va vestida y pintada creo que no va de compras, Más bien ha de ir de ventas'"... Charlaban Himenia Camafría y Celiberia Sinvarón, solteras y maduras. Comentó Celiberia: "Parece muy fino y educado ese señor que te visita". "Lo es -respondió Himenia-. Siempre me dice que está a mis pies. Voy a ver si logro que vaya subiendo poco a poco"... A López Obrador le dio por ser complaciente con los maleantes, a quienes trató con su irritante y absurda cantaleta de "abrazos, no balazos". Ahora se alegran clérigos y funcionarios cuando esos hombres violentos conceden tácitamente una "tregua", y tratan de convencerlos de que nos hagan el favor de respetar la ley. Los criminales suspenden sus malignos hechos por unos días en la temporada de las fiestas, y vuelven luego a matar, a secuestrar a extorsionar sin que nadie los limite. Polvos son éstos de aquellos lodos que AMLO hizo. Los malos campan por sus fueros, y provoca en muchas partes del país la ingobernabilidad que el mismo Gobierno provocó... Una romántica chica oyó la sentida canción yucateca "El pájaro azul", y fue a buscarla en una tienda donde vendían discos LP. Le preguntó al encargado: "¿Tiene 'El pájaro azul'?". "-No -respondió, obsequioso, el tipo-. Pero si quiere me lo pinto"... Llegó un individuo a la tienda de artículos deportivos y se dirigió al hombre que estaba en el mostrador: "¿Tienes pelotas para jugar al tenis?". "-¡Bah! -contesta desdeñoso el individuo-. ¡Ni que se necesitara tanto valor para jugar ese deporte!". (No le entendí)... El propietario de la tienda de animales le mostró a su cliente un perico. "Este loro es increíble -le dijo-. Si le levanta usted la patita izquierda, habla en español. Si le levanta la patita derecha, habla en inglés''. Preguntó el cliente: "¿Y si le levanto las dos patitas al mismo tiempo?". Respondió el cotorro: "¡Pos me voy de culo, pendejo!"... El granjero le indicó a su hija: "El experto en inseminación artificial va a venir a inseminar a una de las vacas. Para que sepa cuál es puse un clavo en el lugar donde está la vaca que debe ser inseminada. Tú llévalo ahí y él hará el ". Llegó el especialista, y la muchacha lo condujo al lugar donde estaba la vaca. Preguntó el hombre: "Y ese clavo ¿para qué es?". "No sé -contestó la chica-. Supongo que es para que cuelgue usted su ropa antes de inseminar a la vaca"... Una señora recibió una pequeña herencia y con ella construyó un local comercial con dos oficinas: una que daba al frente de la calle y otra a la parte de atrás. Su marido tenía una tiendita, y se iba a cambiar al local del frente. El de atrás se rentaría. Así, la mujer puso un letrero en el aparador. Se presentó un sujeto. "Señora -le dice- entiendo que va a alquilar la parte de atrás". "Efectivamente -contestó ella-. La parte de atrás la tengo en renta". Inquirió el visitante: "¿Y por qué no alquila también lo de adelante?". "No -respondió la señora-. Eso es nada más para mi marido"... FIN.

MIRADOR
Por Armando FUENTES AGUIRRE.
Jean Cusset, ateo con excepción de cuando bebe una botella de buen vino, dio un nuevo sorbo a su martini -con dos aceitunas, como siempre- y continuó:
-Si alguien me dice que no cree en Dios yo me pongo a conversar con él. Sé que disfrutaré de una interesante discusión. Pero si alguien me dice que se siente amigo personal de Dios echo a correr asustado.
-Y es que los que se creen amigos de Dios se hacen soberbios -siguió diciendo Jean Cusset-, y a todos los demás nos ven por encima del hombro. Solo ellos están salvos; todos los otros somos unos infames pecadores a los que se puede despreciar. El ateo está quizás un poco enfermo de vanidad. El que se cree amigo personal de Dios sufre mal incurable de soberbia. De él debemos huir igual que de la peste.
Así dijo Jean Cusset. Y dio el último sorbo a su martini, con dos aceitunas, como siempre.
¡Hasta mañana!...

MANGANITAS
Por AFA.
".. Policías de pueblo son cómplices de narcos...".
No sorprenden esas vías;
sólo se cierran los arcos:
policías ayudan narcos,
y narcos a policías.