-“Ya los descubrí, sigan con ese impulso”
-Las preguntas que pasaron desapercibidas
-Llegó tesorero con 700 mil pesos por delante
Contundente el mensaje político de Maru en el informe rendido el sábado ante un auditorio repleto. Relajada, categórica.
Reafirmó su conducción y que es ella la que trae el mando, para quienes no lo quieran comprender a estas alturas, dentro y fuera del equipo. Así o más claro, con recordatorio de la persecución sufrida, incluso por un “vil y traicionero”.
Hay colaboración, pero no hay negociación ni entrega del estado, con saludo a la familia panista presente.
Fueron muchas cifras las presentadas -dos millones de acciones en MediChihuahua, beneficiando a 430 mil personas, por ejemplo; 500 millones para sequía, dos mil 500 millones en seguridad, entre otros-, pero la atención estuvo en esa parte final, donde incluso rompió con protocolo y fue a sentarse en las escalinatas del escenario.
Los asistentes de primera fila se pusieron de pie al verla acercarse, pero ella bromeó y después de estar sentada, caminó al mismo nivel de los invitados.
En esa primera fila, su familia, su pareja, su madre, doña María Eugenia; exgobernadores; Ricardo Anaya; el líder nacional del PAN, Jorge Romero; Myriam Hernández, presidenta del Tribunal Superior de Justicia.
También los alcaldes, Marco Bonilla y Cruz Pérez Cuéllar, hasta el director nacional del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño; Kata Espino, mandona del INE -para quien tuvo palabras-; la representación del ejército, en los generales Rubén Zamudio, Alfonso Rodríguez y Esteban Pérez, así como el comisario Alejandro Rivas de la Guardia Nacional.
Hubo dirigencias de partido, representación sindical -Xóchitl Reyes Castro y dirigentes de maestros, maestros Eduardo Zendejas y Manuel Quiroz-, representación de organismos autónomos, sector productivo, etc. Mayra Chávez, la delegada del Bienestar, hizo presencia, en innegable colmillo político.
El subsecretario de Gobernación, César Yáñez, fue el representante personal de la presidenta Sheinbaum.
Pidió Maru a sus colaboradores ponerse de pie para un aplauso.
Fue pródiga en reconocer acciones y trabajos, pero también en llamar la atención, hacia dentro y fuera de su gobierno.
Marcó raya, justo a la mitad de su administración, así debe ser leído, en evento donde hasta selfie hubo al final.
***
Hace ocho años, era inimaginable que entre el gobierno del Estado y el Municipal existiera trabajo en equipo; un oscuro personaje, cegado por su ira y soberbia, ahora morenista, ocupaba la máxima representación en Chihuahua, mientras que la alcaldía era ocupada por la primer mujer en la historia de la capital.
A la vuelta de cuatro años, las cosas cambiaron, llegaron al municipio y la gubernatura dos personajes que han venido haciendo equipo desde el 2013 y que juntos lograron conquistar espacios para Acción Nacional.
El sábado esta unidad fue muy notoria en el tercer informe de la gobernadora; por un lado, la misma mandataria a modo de broma lanzó el reto del aplausómetro para ver quién de los invitados llevaba más porra y el resultado fue el que todos esperaban, el alcalde Marco Bonilla se llevó los aplausos, algo que sin duda agradó a Maru por la sonrisa que mostró.
Sin embargo, algo que llamó más la atención luego de concluidas las porras para el edil capitalino, fue lo que expresó Maru Campos: ya los descubrí, sigan con ese impulso, como si señalara que los chihuahuenses ya tienen a su favorito para el 2027 y apoyará esa decisión.
***
El tesorero municipal de Morelos, Adrián Bojórquez, llegó a la Auditoría Superior del Estado (ASE) con el comprobante de una transferencia de casi 700 mil pesos por delante. Estaba citado a una reunión para atender observaciones de su gestión en ese mismo cargo durante 2022, pero evidentemente ya sabía a lo que iba.
Fue hace unos días, nos reportan, cuando estaba citado a responder el funcionario dentro del procedimiento formal de revisión a la cuenta pública de la administración municipal encabezada por José de Loreto Javalera Bojórquez.
La ASE detectó que la Tesorería Municipal transfirió 693 mil 200 pesos a una persona por supuestamente haber realizado una obra; sin embargo, dicho trabajo lo realizó otra empresa con la que en realidad se tenía el adeudo, extraña e innecesaria triangulación que quién sabe qué pretendía esconder.
No había propiamente un desfalco al erario del empobrecido municipio que maneja apenas unos 70 millones de pesos al año, la mayor parte en nómina y operación gubernamental, pero sí una llamativa conducta irregular que, según lo que pudimos conocer, Bojórquez atribuyó a mero error.
Por eso, al acudir a responder a la ASE, llegó con la novedad de que el dinero se había reintegrado a las arcas municipales y tan-tan, no había delito ni falta administrativa qué perseguir, elemento que le sumó atractivo e interés a esa jugadita de un gobierno municipal.
Por un lado, dicen, ha sido notable el trabajo de la Auditoría Superior y del Tribunal Estatal de Justicia Administrativa (TEJA), sobre todo a partir de la reestructura de éste último, que antes avanzaba a paso de tortuga en todos los asuntos que le eran dirigidos, pero ahora con cinco magistrados está obligado a mantenerse con las pilas bien puestas.
Eso puede servir para disuadir a los funcionarios públicos de meterle la mano al cajón, al menos para pensarla dos veces antes de actuar como a algunos les dicta su naturaleza política.
De ahí que, posiblemente, el tesorero optó por corregir rápidamente el entuerto, lo que no fue obstáculo para procesarlo por la posible falta administrativa, independientemente de si hubo daño o no a las finanzas municipales; o de si fue un simple error una transferencia de ese tamaño u otra cosilla la que planeaba.
La última palabra la tendrá el TEJA en los próximos días.
***
Por lo ajetreado de la sesión del viernes, pasaron desapercibidas las tres respuestas otorgadas por distintas autoridades a preguntas de legisladores morenistas, a Pensiones Civiles, Secretaría General de Gobierno y Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
Relevante el dato de Pensiones Civiles, porque los otros dos aspectos más bien tienen qué ver con migración, que es tema federal, y el estado sólo coadyuva, y el otro es un asunto politizado, que tiene que ver con el traído y llevado cártel inmobiliario que Morena ha querido introducir en el imaginario del marketing político.
Decimos que es trascendente el asunto de Pensiones, porque oficialmente solo hay desabasto del ocho por ciento de medicamentos enlistados en el cuadro básico de mil 24 claves, lo cual contrasta con la queja de los maestros, que han salido a las calles a denunciar el hecho; alguien tiene datos incorrectos.
Donde sí hay tema es en el adeudo de 192 millones a la proveeduría de Pensiones, lo cual es significativo, aunque la institución diga que no ha provocado problemas de abasto; hay compromiso de PCE de estabilizar ese faltante de medicamentos a finales de febrero y principios de marzo, en lugar de medio año como ocurre históricamente.
Hay otros datos interesantes, el monto anual de gasto en medicamento de la institución es de 842 millones, y de ellos, sólo 42 corresponden a medicamentos subrogados, cerca del cinco por ciento.
Pero es al final del oficio firmado por el responsable de Pensiones Civiles, Marco Antonio Herrera, donde hay área de oportunidad, donde está el quid del asunto.
Los adeudos de dependencias y organismos descentralizados, la parte patronal, que fue omisa en hacer las aportaciones y descuentos pertinentes, conforme a la reforma del 2014, y que ha generado un gran boquete, y que sigue pendiente de cubrirse.
***
Hay gato encerrado en los datos que han sido manejados en cuanto a los márgenes de ganancia por parte de los gasolineros y la conformación del precio de las gasolinas desde el monopolio de Pemex.
Dicen los gasolineros que en promedio son 315 mil litros los que vende una estación de despacho, con margen de ganancia que en algunos casos no llega ni a un peso con 20 centavos, con promedio de cerca de 80 centavos.
Así no es negocio tener una gasolinera, con ganancias de 300 mil pesos, donde hay que descontar salarios, prestaciones, servicios, etcétera.
Y del otro lado, tampoco hay transparencia, para determinar costo de producción, transporte, impuestos -IEPS e IVA-.
Hay una amplia zona de oscuridad, donde el consumidor termina siendo la víctima, porque, a casi una semana del famoso pacto de los 24, la gasolina anda en algunos casos hasta en 26 pesos la magna.
Obvio es, debe existir un pacto fiscal, fuera máscaras, porque ahorita hay pingües ganancias de gasolineros y del mismo gobierno, con costo a los automovilistas, y repercusión necesaria en la inflación, por el alto costo del flete de mercancías.
Pero además mucho de ese impuesto va a las entidades federativas y municipios vía participaciones, por lo que cualquier decisión fiscal hasta allá tendrá repercusiones.
Nadie quiere entonces ponerle el cascabel al gato, quedando en un acuerdo de buenas intenciones que está lejos de ser cumplido.