Estefanía Maturana, de solo 27 años, fue encontrada muerta el domingo en un motel de Quilicura, Chile.
Había ingresado al lugar junto a dos amigas en la madrugada, quienes luego regresaron con un hombre. Horas más tarde, el personal del motel encontró su cuerpo en un jacuzzi, con signos claros de asfixia y una sábana amarrada al cuello.
Según la autopsia, murió por compresión externa de cuello, es decir, fue ahorcada.
Minutos antes de su muerte, Estefanía habría enviado un desgarrador mensaje de voz a su madre diciendo: “Me están intentando ahorcar”. La familia exige justicia mientras la PDI investiga la posible participación de terceros. La estremecedora historia ha conmocionado a las redes, no solo por su brutal desenlace, sino por las dudas que persisten: ¿qué pasó realmente en esa habitación?.