En un video titulado "Plan para rescatar a Hollywood", Voight explicó sus intenciones tras el anuncio de Trump de autorizar al Departamento de Comercio y al Representante Comercial de EE. UU. a iniciar un proceso de aranceles del 100 por ciento sobre las películas estadounidenses producidas en el extranjero.
"Él quiere ver a Hollywood prosperar y hacer películas más grandes y grandiosas que nunca, como él mismo dice, y ver que las producciones regresen al Hollywood estadounidense. El Hollywood del que me enamoré de niño y al que tuve el honor de contribuir durante mi carrera", expresó.
Voight, de 86 años, destacó las dificultades que ha enfrentado la industria cinematográfica en los últimos años, con muchos estadounidenses perdiendo sus empleos debido a la reubicación de producciones en otros países.
"Nuestra industria ha sufrido mucho, y muchos estadounidenses han perdido sus empleos debido a producciones que se han trasladado al extranjero. Ha sido muy grave. Mucha gente ha perdido sus hogares. No pueden alimentar a sus familias", afirmó.
El actor, quien mantiene una relación cercana con la Casa Blanca, también reveló que, tras reunirse con varios líderes del entretenimiento, presentó a Trump una serie de recomendaciones fiscales diseñadas para beneficiar a la industria del cine y la televisión.
Entre estas propuestas se incluyen incentivos fiscales federales, modificaciones al código tributario, tratados de coproducción y subsidios para productores, salas de cine y empresas de posproducción.
"Tras reunirme con muchos líderes del entretenimiento, he presentado recomendaciones al presidente sobre ciertas disposiciones fiscales que pueden beneficiar a la industria. Algunas disposiciones podrían extenderse y otras podrían reactivarse o implementarse. Esto beneficiaría a la producción cinematográfica y televisiva, y a nuestros queridos cines, tan importantes para la experiencia familiar estadounidense", explicó.
A pesar de que las recomendaciones de Voight incluyen los aranceles, en un comunicado de prensa mencionó que estos podrían aplicarse solo en "circunstancias limitadas", en lugar de imponer un arancel del 100 por ciento a todas las películas extranjeras, como lo había planteado Trump inicialmente.
Voight, quien fue nombrado "embajador especial" de Trump en Hollywood a principios de este año, junto con Mel Gibson y Sylvester Stallone, ha jugado un papel clave en las conversaciones sobre la revitalización de la industria del entretenimiento en Estados Unidos.
Trump calificó las producciones extranjeras como una "amenaza a la seguridad nacional" debido a los incentivos que otros países, como el Reino Unido y Canadá, ofrecen para atraer a cineastas y estudios de Hollywood, lo que ha afectado negativamente a la economía local, provocando la pérdida de empleos y hogares en el país.
No obstante, la implementación de estos aranceles podría tener implicaciones significativas, tanto económicas como creativas. Muchas películas se ruedan en el extranjero por razones que van más allá de los costos, como necesidades creativas, lo que podría afectar la producción de cine en esos países si se aprueba el arancel del 100 por ciento, informó el medio Rolling Stone.