El líder de un suburbio de Nueva York está reclutando a 75 ciudadanos armados, muchos de ellos ex policías, para una fuerza de "ayudantes especiales" que se activará cuando él decida.
El ejecutivo del condado de Nassau, Bruce Blakeman, un republicano que se ha aliado con el expresidente Donald J. Trump y se ha metido de lleno en las guerras culturales, publicó en marzo una convocatoria para residentes con permiso de armas e interesados en convertirse en "ayudantes del sheriff especiales de emergencia provisionales."
La publicación llamó a la iniciativa una estrategia para ayudar en la "protección de la vida humana y la propiedad durante una emergencia", como un huracán o un apagón - y tal vez, el Sr. Blakeman añadió más tarde, "un disturbio."
La nueva fuerza ha suscitado una fuerte oposición en este acomodado condado de Long Island, que es uno de los más seguros del país, protegido por uno de los mayores departamentos de policía. Ha sumido a Nassau en un debate nacional sobre el autoritarismo en una temporada electoral que algunos ven como una bifurcación en el camino de la democracia estadounidense.
El Sr. Blakeman dijo en una entrevista que el programa se trataba de "proporcionar otra capa de protección" para los residentes. "No quería encontrarme en una situación en la que tuviéramos una emergencia grave y necesitáramos ayuda y las personas no estuvieran debidamente investigadas o formadas", dijo.
Pero sus críticos le han acusado de crear, sin previo aviso ni explicaciones, una milicia no autorizada que sólo responde ante él. Calificaron la medida de especialmente peligrosa en un momento en el que aumentan los temores de violencia política y en el que Trump promulga planes de deportaciones masivas y de represión de la disidencia.
Sabine Margolis, un gerente de programa de I.T. de Great Neck, dijo que el Sr. Blakeman estaba usando el pretexto de un equipo de respuesta de emergencia para crear una "presencia armada clandestina". Su petición en línea llamada "Stop Bruce Blakeman's Personal Nassau County Militia" ha recibido más de 2.600 firmas, y los opositores han celebrado mítines poniendo en la picota tanto el programa como la falta de detalles sobre la formación, el alcance del reclutamiento y los parámetros de los deberes de los diputados.
El Sr. Blakeman rechazó las críticas de que el programa tiene motivaciones políticas, pero ha provocado una reacción más contundente que sus provocaciones anteriores. Ha arremetido contra la reforma de la libertad bajo fianza, los migrantes y los mandatos máscara, ha llamado a los demócratas como el gobernador Kathy Hochul suave en la delincuencia y ha retratado el condado de Nassau como asediado por la anarquía - y utilizó la vecina ciudad de Nueva York como un ejemplo de advertencia.
Pero los oponentes del Sr. Blakeman dicen que dar poderes policiales a los civiles propietarios de armas podría dar lugar a tiroteos accidentales y es una amenaza implícita para las minorías y los enemigos políticos.
"Es alarmismo, y es muy perjudicial para la gente", dijo Delia DeRiggi-Whitton, líder de la minoría demócrata de la Legislatura del Condado.
"Es lo contrario de lo que queremos, una milicia privada con armas", dijo. "Estamos tratando de trabajar en el control de armas, en lugar de promoverlas".
El Sr. Blakeman dijo que creó la fuerza para que "en caso de emergencia, si los necesitáramos para proteger infraestructuras o edificios gubernamentales o escuelas u hospitales, eso liberaría a nuestra policía."
De los aproximadamente 100 solicitantes hasta ahora, unos 25 ya han recibido formación, dijo el Sr. Blakeman, y tiene previsto formar a 50 más. Su oficina no quiso facilitar los nombres de los solicitantes, pero describió los antecedentes de casi una veintena de miembros: una mezcla de agentes de policía jubilados, antiguos veteranos y otros agentes de emergencias, además del presidente de un banco.
Los inscritos reciben formación sobre la ley, las armas de fuego y el uso de la fuerza letal, ha dicho el Sr. Blakeman. Tienen preferencia los agentes de policía retirados, los veteranos militares y los guardias de seguridad.
Un portavoz dijo que el condado paga a los miembros su estipendio diario de 150 dólares con cargo a los impuestos sólo cuando son activados para emergencias, que utilizan sus propias armas y que hay una lista de armas de fuego permitidas.
El Sr. Blakeman dijo que el programa no era una milicia y calificó de "ridículo" el argumento del control de armas. Estar armado, dijo, es crucial en una emergencia.
"¿Cómo podrías proteger las infraestructuras si no vas armado?", dijo, y añadió: "¿Qué deberíamos hacer? ¿Escondernos bajo las sábanas?".
La cuestión de la nueva fuerza se volvió especialmente polémica después de que el Sr. Blakeman reconociera en abril que los diputados podrían ser activados para patrullar manifestaciones caóticas. Cuando un reportero de WPIX le preguntó si podía declarar una protesta política como una emergencia, dijo, "si el disturbio llegaba a un nivel en el que estuvieran quemando edificios."
Preguntado por el comentario en una entrevista esta semana, el Sr. Blakeman dijo que las protestas se dejarían en manos de la policía. Sobre el programa de ayudantes especiales, dijo: "Por supuesto, no se utilizaría con fines políticos".
Ni el sheriff del condado ni la policía respondieron a las peticiones de comentarios.
En Nueva York, un ejecutivo de condado administra oficialmente presupuestos e impuestos, y servicios como carreteras y parques. Pero el cargo también puede ser una estación de paso hacia puestos más altos, y Blakeman, en el cargo desde 2022, aparece regularmente en Fox News y otros medios de comunicación.
Su defensa de las cuestiones de carne roja le ha granjeado el cariño de los votantes conservadores en el condado de 1,4 millones de residentes. Aunque los demócratas tienen una ligera ventaja sobre los republicanos como votantes registrados allí, el Sr. Blakeman derrotó a la titular, Laura Curran, en parte por hacer campaña con la promesa de "restaurar la ley y el orden".
En febrero, Blakeman saltó a los titulares nacionales con una orden ejecutiva que prohibía a los deportistas transexuales jugar en campos propiedad del condado a menos que compitieran en un equipo mixto o en el que coincidiera con su sexo de nacimiento. En mayo, un juez dictaminó que Blakeman carecía de autoridad para dictar la orden. Al mes siguiente, la asamblea legislativa del condado, controlada por los republicanos, votó a favor de su promulgación como ley.
Jay Jacobs, presidente del Partido Demócrata en el condado de Nassau y en el estado de Nueva York, acusó a Blakeman de utilizar estas cuestiones para distraer a los votantes de su falta de progreso en la reducción de los impuestos sobre la propiedad y las tasas y la fijación del sistema de evaluación de la propiedad.
"Todo esto es para solidificar su base de extrema derecha", dijo Jacobs. "En lugar de resolver los problemas del condado, está apelando a la derecha hablando el lenguaje que les gusta: milicia, armas, ley y orden".
"No hay ningún problema que él pretenda resolver", añadió el Sr. Jacobs. "¿Cree que vamos a ser invadidos por el condado de Suffolk?".
Los críticos dicen que el plan de Blakeman refleja insinuaciones de violencia por parte de Trump y sus aliados. Trump ha dicho que habría que disparar a los ladrones, ha sugerido que sus partidarios podrían cometer actos violentos si el Tribunal Supremo fallara en su contra y se ha negado a descartar la violencia política si perdiera en noviembre. Planea delegar en las fuerzas de seguridad locales la ejecución de deportaciones masivas de inmigrantes.
La Sra. DeRiggi-Whitton dijo en una entrevista que había oído a residentes judíos que comparaban la iniciativa del Sr. Blakeman con el ascenso de las fuerzas nazis bajo Hitler. Una persona se refirió a los Brownshirts, un ala paramilitar del Partido Nazi formada en la década de 1920.
Cuando la Sra. DeRiggi-Whitton dijo esto a los periodistas en abril, el Sr. Blakeman, que es judío, calificó la comparación de ofensiva y exigió su dimisión.
Su plan ciertamente tiene partidarios, entre ellos Jennifer O'Sullivan, de 51 años, una votante republicana que dijo que los diputados podrían haber ayudado, por ejemplo, cuando las casas fueron robadas después de ser evacuadas por el huracán Sandy.
"El condado sólo quiere estar preparado, y no están acorralando a nadie", dijo. "Las personas con permiso de portar armas son extremadamente respetuosas con la ley. Tienen que tener un expediente limpio y referencias sobre su carácter".
El Sr. Blakeman dijo que existe un programa similar de ayudantes especiales en el condado de Westchester, dirigido por un ejecutivo del condado demócrata.
Pero la jefa de operaciones de Westchester, Joan McDonald, dijo que la fuerza de Westchester, que proporciona apoyo para desfiles y festivales, opera bajo una medida promulgada por la Legislatura del Estado hace décadas específicamente para el condado.
Los miembros reciben 178 horas de formación, incluidas 67 horas sobre armas de fuego, de acuerdo con las normas estatales para los agentes de la paz, dijo. Y lo que es más importante, dijo, sus agentes responden ante el Departamento de Seguridad Pública del condado.
En una carta reciente a los legisladores de Nassau, la Sra. McDonald escribió: "Westchester no ha creado una milicia privada, como el Ejecutivo del Condado Bruce Blakeman ha hecho."
Sr. Blakeman dijo que sus críticos están atacando - y exagerando - un programa que hará que el condado más seguro.
"Es una base de datos y no es nada más que eso", dijo. "La gente está tratando de hacerlo más de lo que es".
