Washington.- El líder de Hamas, Yahya Sinwar, es fatalista después de casi un año de guerra en Gaza y espera ver que Israel se involucre en un conflicto regional más amplio, según dijeron oficiales de Estados Unidos.

Desde hace tiempo, Sinwar no creía que pudiera sobrevivir a la guerra, un punto de vista que ha frenado las negociaciones para liberar a los rehenes que fueron tomados por el grupo en los ataques perpetrados el 7 de octubre en Israel, de acuerdo a evaluaciones de inteligencia estadounidense.

Su actitud se ha endurecido en las últimas semanas, por lo que los negociadores estadounidenses creen que Hamas no tiene la intención de llegar a un acuerdo con Israel.

El primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel también ha rechazado las propuestas de las negociaciones y ha agregado una postura que ha complicado las pláticas.

Oficiales de Estados Unidos consideran que primordialmente está preocupado por su supervivencia política y tal vez piensa que un cese al fuego en Gaza no favorecería a sus intereses.

Hamas no ha mostrado el deseo de participar en las negociaciones en las últimas semanas. Sospechan que Sinwar está cada vez más resignado a que las fuerzas israelíes lo persigan y habla acerca de que lo van a atrapar.

Una guerra más larga presionaría a Israel y su ejército, según la evaluación que ha hecho Sinwar, y lo forzaría a disminuir las operaciones en Gaza, dijeron oficiales de Estados Unidos.

La guerra en la región se ha ampliado, pero no de una manera que haya beneficiado significativamente a Hamas, por lo menos no todavía.

Desde que la campaña israelí en contra de Hezbolá empezó el mes pasado, el grupo no ha lanzado un importante contraataque en Israel, mucho menos ha abierto un frente ofensivo.

Oficiales estadounidenses e israelíes aseguran que Israel ha destruido la mitad del arsenal de la milicia y ha matado a muchos de sus líderes.

Las tropas israelíes se movieron hacia el sur de Líbano en esta semana, después de casi un mes de bombardeos y sabotajes que incluyeron un ataque en donde eliminaron a Hassan Nasrallah, líder de Hezbolá.

Irán, que apoya a Hezbolá y Hamas, lanzó una lluvia de misiles contra Israel este martes como respuesta al asesinato de Nasrallah.

Aunque la mayoría de los misiles fueron derribados o no causaron un daño verdadero.

La falla de Hezbolá o de Irán de causarle un daño significativo a Israel, por lo menos hasta ahora, es una señal del mal cálculo de Sinwar, dijeron oficiales estadounidenses.

Aislado y oculto en Gaza, la comunicación de Sinwar con su organización se ha visto presionada, ha dejado de usar aparatos electrónicos desde hace tiempo y se mantiene en contacto con su organización a través de una red de mensajeros.

El ritmo de las operaciones israelíes en Gaza ha disminuido, ya que Israel ha desviado su atención al norte.

Tampoco han realizado importantes redadas en áreas civiles en Gaza durante semanas, aunque sigue lanzando ataques aéreos diarios contra Hamas.