Los Ángeles— Una periodista australiana y un fotógrafo británico resultaron heridos este fin de semana mientras cubrían manifestaciones en Los Ángeles contra las redadas migratorias. La policía local utilizó proyectiles de control de multitudes para dispersar a los manifestantes, lo que provocó que ambos comunicadores fueran alcanzados por balas de goma.

Lauren Tomasi, corresponsal en Estados Unidos para el canal australiano Nine News, fue impactada por una bala de goma mientras informaba desde el exterior del Centro de Detención Metropolitana, en el centro de Los Ángeles. En medio de su reporte en vivo, justo cuando la policía montada del LAPD irrumpía en la protesta, se le escuchó gritar de dolor tras recibir el impacto en la pierna. “Después de horas de tensión, esta situación se ha deteriorado rápidamente. El LAPD avanza a caballo, disparando balas de goma a los manifestantes”, narró Tomasi segundos antes de ser alcanzada. A pesar del golpe, aseguró estar bien: “I’m good”, respondió cuando un testigo le preguntó si se encontraba bien.

Nine News emitió un comunicado en el que confirmó que tanto Tomasi como su camarógrafo están a salvo y seguirán con su cobertura. “Este incidente es un recordatorio claro de los peligros que enfrentan los periodistas al informar desde la primera línea de las protestas”, afirmó la cadena.

El mismo fin de semana, el fotógrafo británico Nick Stern resultó herido por una bala esponjosa de 14 mm mientras documentaba un enfrentamiento entre manifestantes y la policía en la ciudad de Paramount, en el condado de Los Ángeles. Stern, quien estaba identificado como prensa, fue trasladado de urgencia al Long Beach Memorial Medical Centre para una cirugía de emergencia. “Mi primera preocupación fue saber si estaban disparando munición real”, declaró a la agencia PA. A pesar del sangrado y la gravedad de la herida, el fotógrafo aseguró que planea seguir trabajando: “Esto es demasiado importante, hay que documentarlo”.

No es la primera vez que Stern resulta herido en una protesta: durante las manifestaciones por la muerte de George Floyd en 2020, ya había sufrido contusiones considerables tras recibir un disparo.