Chihuahua, Chih.- El Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano emitió un comunicado en el que indicó que mantiene abierta la negociación con el gobierno federal y reconoce la disposición para convocar a la industria agroalimentaria y mejorar la comercialización de granos, luego de una reunión celebrada ayer por la noche en la Ciudad de México con autoridades.

Añadió que en 2026 serán retomadas las negociaciones para atender el resto de las demandas estructurales del sector, incluido el impulso al Banco de Desarrollo Agropecuario.

Añadió que tras meses de movilización social y presión organizada, el Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano reportó avances concretos en favor de los productores agrícolas del país, al abrirse una ruta de solución financiera para la comercialización de granos, sin romper el diálogo con el gobierno federal.

Heraclio Yako Rodríguez, líder del Frente, señaló que si bien no se alcanzó un acuerdo en precios de garantía, sí se logró construir un esquema alternativo que permite atender de manera inmediata la falta de liquidez que enfrenta el sector: la pignoración de granos con respaldo del Estado mexicano.

“Venimos de una lucha que se dio en distintos frentes: en las calles, en las carreteras, en las oficinas y en la mesa de negociación. Cada quien desde su trinchera, pero con un objetivo común. Hoy podemos decir que hay avances”, expresó Rodríguez.

El esquema de pignoración permitirá a los productores acceder a créditos usando sus cosechas como garantía, sin perder la propiedad de los granos y sin que los costos financieros o de almacenamiento recaigan en ellos.

“Dichos costos serán absorbidos por el gobierno federal, o de manera conjunta con los gobiernos estatales, lo que otorga a los productores hasta seis meses adicionales para comercializar sus cosechas en mejores condiciones de mercado”, apuntó.

Rodríguez subrayó que el gobierno federal se comprometió además a convocar a los grandes consumidores de maíz, frijol, trigo, sorgo y soya, con el fin de incentivar la compra de productos nacionales y mejorar los precios pagados al productor. “Este esquema deberá ir acompañado de convenios de compraventa con la industria agroalimentaria, en los que el Estado fungirá como garante”, expuso.

“El recurso que se obtenga por la pignoración será un adelanto a cuenta de la cosecha. Eso nos permite cumplir compromisos inmediatos —fertilizantes, semillas, agroquímicos o créditos bancarios— sin malbaratar nuestro producto”, explicó.

El líder del Frente enfatizó que se trata de una medida de alcance nacional, abierta a todos los productores que decidan acogerse al esquema, y reiteró que el movimiento mantiene una postura de conciliación y responsabilidad institucional.