-Con una sola toma funcionando La Boquilla
-Viene el descabezadero también con los jueces locales
-El nerviosismo del examen Ceneval el viernes

Una de varias financieras fraudulentas que operaron en Chihuahua bajo la sombra de Aras, denominada SOI Consultoría o Sueña Inversiones, dejó en la calle a más de 150 personas, aunque no todas denunciaron el atraco del que, mediante engaños, fueron víctimas.
Por este caso, nos reportan que ya fueron acusados por fraude Juan Pablo Ch., Jaqueline P.A y Lourdes B., a quienes los investigadores estatales trataron de probar un modus operandi nada sofisticado, que consistía en levantar capital de sus víctimas para supuestas inversiones inmobiliarias, aunque en realidad su negocio era meter ese dinero a Aras, con las consecuencias ya conocidas.
Los casos datan desde 2022, sin embargo, la Fiscalía Zona Centro, siempre lenta y burocrática, tanto ahora como antes, parece que se quedó dormida en la causa penal correspondiente. Nos aseguran en los tribunales que ha caminado la causa penal con sus altibajos de siempre, pero hay avances relevantes en la judicialización que, finalmente, trata de encontrar alternativas para la reparación del daño a los afectados.
Sin embargo, los temas de interés para la sociedad parecen importarles menos que un cacahuate a la FGE, incapaz siquiera de mostrar los avances de sus investigaciones, ya no se diga de presumir algunos de sus resultados.
Bueno, fue esa señal de ineficiencia o, para variar, la instancia investigadora pretendió mantener el caso en lo oscurito, por aquello de que SOI podría pisar algunos intereses de la justicia.
Porque resulta, también para variar, que este fraude embarra a personal del Tribunal Superior de Justicia del Estado, donde laboró tal vez alguno de los promotores del fraude y donde laboran todavía algunas de las víctimas, también relacionadas con la burocracia investigadora.
Tal vez eso es lo que explica lo adormilados que están en la Fiscalía estatal para dar el seguimiento oportuno a los casos que en verdad le interesan y le duelen a la población. Si con Aras todavía no puede resolver a pesar de tener millones de pesos en bienes asegurados, qué no podrá pasar con estos casos más pequeños, pero igual de graves para las víctimas.

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La presa La Boquilla está en estos momentos prácticamente a nada de dejar de ser útil, al aproximarse al punto más bajo de almacenamiento.
Ha llegado a esta condición por la extracción con motivo de la última etapa del ciclo de riego y la evaporación continua por las altas temperaturas.
Anda por los 540 millones de metros cúbicos de almacenamiento, cerca del 24 por ciento del total de su capacidad.
La expectativa es que llegue a los 520 millones, máximo 500, hasta por seguridad de la misma cortina y la estructura en general de la presa.
De las siete tomas con que cuenta, cuatro dejaron de funcionar hace mucho. Son las que corresponden a la Comisión Federal de Electricidad con sus turbinas.
De las tres adicionales, dos son altas y una sola baja. A través de ésta última es con la que se está extrayendo el agua para terminar con la cantidad autorizada por el ciclo de siembra.
Ya falta poco para llegar a los mil y cacho de millones de metros cúbicos autorizados para la agricultura, en beneficio de los distritos de riego beneficiados.
La esperanza son los 24 huracanes que están esperados en el océano pacífico, cuatro o cinco de muy buen nivel y expectativas de tocar tierra por Sinaloa, con uno solo de ellos que llegue y pegue bien.

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El subsecretario de movilidad, César Komaba, deberá solicitar una explicación del porqué un oficial en bicicleta tenía detenida una pickup de color rojo, al parecer una Ram, ayer a eso de la una de la tarde con cuarenta minutos, en la Independencia y Niños Héroes.
Nos dice un asiduo lector de GPS que el oficial detuvo la pickup al parecer sin ninguna razón, solo porque en ella eran transportados un par de colchones en la cajuela; no traía dimensiones excedidas ni nada por el estilo.
El conductor y su acompañante parecían ser dos personas muy jóvenes, que realizaban el transporte de su carga, al parecer sin cometer infracción alguna, lo cual fácilmente quedará dilucidado, una vez que Komaba revise la bitácora y vea la infracción.
Si al buscar no hay infracción, entonces la respuesta a nuestra interrogante será muy clara y evidente, hubo mordida de por medio, vil extorsión sólo por cargar un par de colchones, haciéndole un favor a alguien seguramente.
Hace rato que no recibíamos quejas de esta naturaleza, pero ahí está el dato atendiendo al reclamo llegado a esta redacción.

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Tuvieron que hacer un ejercicio de paciencia los consejeros electorales del Instituto Estatal Electoral con la representante del PAN, Mariana Lachica, en la sesión virtual efectuada a media tarde el sábado, la 44 extraordinaria urgente, de esas convocadas apenas con horas o minutos de anticipación.
No comprendía Lachica porqué los paquetes debían ser resguardados en una bodega aquí en la ciudad de Chihuahua, en lugar de permanecer en Ocampo, hasta que concluya el plazo para impugnaciones.
Discreparon los consejeros con Mariana en el punto de si los paquetes formaban parte del expediente que en dado caso pudiera ir al Tribunal Estatal Electoral; nos dicen que no necesariamente van a sede jurisdiccional, sólo van cuando es necesario hacer recuento, de lo contrario es ocioso.
Pero con independencia de ello, es clarísimo que si los paquetes ya habían sido sustraídos, muy bien pudieran ser de nuevo objeto de un robo, dada la inseguridad existente en el lugar, por parte los grupos delincuenciales. Tenían que ser trasladados a esta ciudad, sí o sí.
Esa sola cuestión hubiera ameritado un acuerdo inmediato, para qué tanta alegata.
No se dijo, pero hay críticas a la policía municipal del lugar que se negó a resguardar los paquetes, sin embargo poco podían hacer ellos para protegerlos, mal armados y apenas unos cuantos. Pero, no hay explicación alguna del por qué la Guardia Nacional o la misma Sedena fueron omisas en intervenir cuando ellas tienen la capacidad de fuego y número de elementos para intervenir.
Esa aclaración de inacción no existió y con seguridad no llegará, pero en el fondo el asunto es que el PRI con sus aliados ganó al PT, y que Morena quedó en un lejísimo lugar con apenas un par de centenares de votos. Ahí podría estar la explicación, lo que parece ser un uso faccioso de la seguridad.
Esa intervención del grupo criminal, como fue que se llevaron y regresaron los paquetes, debe ser aireado, más allá del evidente cansancio que ya muestra la representante del PAN, partida en dos, entre los cómputos y la sesión. 

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No son dos mil los estudiantes que van a presentar examen de admisión este próximo viernes en la Universidad Autónoma de Chihuahua, como publicamos erróneamente el sábado pasado, en este mismo espacio, sino doce mil.
Todos ellos, deberán ponerse las pilas como coloquialmente se dice porque el examen Ceneval va en serio.
No hay una cifra estimada de alumnos que se queden en las quince facultades, pero puede tomarse como referencia lo que ocurrió el semestre anterior, en la admisión para el ciclo enero-junio, que acaba de concluir.
En aquel entonces hicieron el examen casi cuatro mil alumnos, de los cuales fueron admitidos cerca de 3 mil 700, casi un ochenta y cinco por ciento.
La Universidad ha insistido en que los alumnos deben prever que la duración del examen será de cuatro horas y media, dormir bien, ir desayunados y llevar la documentación indispensable.
Deberán portar identificación oficial con fotografía (obligatorio), la ficha de admisión y el comprobante de pago, puntuales a las ocho de la mañana en la unidad académica respectiva.
En caso de no quedar en la facultad elegida, la Universidad le dará al estudiante otras dos opciones a elegir para que ingrese y realice estudios de educación superior.

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Mientras pelea el presidente de la República con los mercados y el súper peso, con la idea de aplicar el próximo año la reforma judicial radical planteada desde febrero de este año, hay nerviosismo no sólo en el poder judicial federal, sino también en el estatal.
Son no menos de 30 magistrados y varias decenas de jueces, los que tendrían que ir a elecciones extraordinarias el próximo año, para en igualdad de condiciones, competir con las propuestas del ejecutivo estatal, el Congreso y el mismo Tribunal Superior de Justicia.
Es decir, no sólo habría descabezadero a nivel federal, sino que habría un plazo perentorio para que los congresos de los estados adecúen sus legislaciones estatales a la federal, que el presidente está empecinado en sacar fast track en septiembre, gracias a la mayoría calificada que seguramente el INE respaldará y el Trife ratificará en las próximas semanas.