Desde que Trump llegó al poder, afloran miles de indicios claros, para afirmar que Wall Street está siendo saqueada por las compañías financieras de Donald Trump y socios, hoy funcionarios en la Casa Blanca; que usaron el poder presidencial para infundir pánico en alzas y bajas de la Bolsa a voluntad, mientras se llevaban un gran botín económico; que manipularon los aranceles para, infundir pánico a los inversores y obligarlos a vender baratas sus acciones y así defraudarlos.
Son muchos indicios de que robaron a la vista de todo el mundo, y que se hicieron de riquezas aún incuantificables, púes se sospecha que ya llevan tiempo organizando mañosamente alzas y bajas en la de la Bolsa y de ahí obtener muchas riquezas.
Dijo Trump a Charles Schwab: “hoy ganaste más de 2,500 mmd; y tú, (dirigiéndose a otro de sus funcionarios), ganaste 900 md”. Así lo festejó abiertamente. Y todo quedó video filmado. Shwab es socio de Trump en su compañía financiera que invierte en la bolsa neoyorkina; así lo afirmó Trump cuando recibió a los Dodgers en la oficina oval. Vale recordar que varios, si no es que todos, los funcionarios de Trump, son dueños de grandes empresas financieras que han sacado del “negocio” de “comprar barato acciones, bonos, etc., para venderlas caras”, en las Bolsas, sus riquezas enormes.
El día 9 de abril a las 10:00 am, las huellas del delito de esta estafa histórica, la más grande de la historia financiera, imputada al mandatario gringo, descaradamente y públicamente dejó otra huella muy clara del delito, púes en su tweeter (sic), mandó el mensaje, que es la clave para los estafadores de alta escuela: “ES UN GRAN MOMENTO PARA COMPRAR… DJT”.
Es el modus operandi, que realizaron el día que tomo posesión como presidente al lanzar su “criptoTrump” y la “criptoMelanie”, en cuya estafa ganaron ambos en minutos, miles de millones de dólares. Lo mismo pasó con la estafa del presidente argentino Javier Milei con la “criptoMilei”; investigado por las autoridades financieras de Estados Unidos por denuncias de decenas de inversionistas norteamericanos que perdieron cerca de 100 md.
“¡Me gusta hacer negocios, preferentemente grandes. Ese es mi arte. Esa es mi poesía!”... Escribió Trump hace días.
Con motivo de estos hechos repudiados mundialmente, ya están abriendo investigaciones por varios delitos financieros, a petición de senadores demócratas e inversores privados, estafados por la manipulación de la Bolsa que se presume están haciendo, los empresarios-funcionarios de Donald.
Al mismo tiempo en que estafaban en la Bolsa, siguen sumiendo en el caos económico al mundo. Es increíble que un solo personaje con tantísimos y peligrosísimos antecedentes, tiene al desarrollo de muchos países, la vida de miles de millones de seres humanos en vilo de perder sus empleos y la alimentación de sus hijos. Es preciso decir, que el despido masivo de trabajadores ha empezado en varias partes del mundo. Por lo pronto a Chihuahua lo está perjudicando con la disminución del 25% de exportaciones y seguramente ya hay despidos en varias empresas transnacionales.
Todo el mundo está envuelto en la incertidumbre y la ansiedad de esta guerra comercial, desatada irracionalmente por un solo hombre, cuya finalidad no es el bienestar ni de su pueblo ni mucho menos de la especie humana, pues su adicción son los billetes logrados ilícitamente a costa del bienestar mundial.
En ese mismo contexto de delincuentes financieros de alta escuela manipulando las Bolsas, los aranceles a 185 países equivalen a “un pago del derecho de piso”, a un gobierno cuya influencia mundial está visiblemente en declive; y pone en gravísimo peligro el desarrollo de los pueblos, con las funestas consecuencias que ello implica.
Como todos saben, a Donald Trump se le ocurrió que el Mundo “debe seguir manteniendo y enriqueciendo a Estados Unidos imponiéndole impuestos y chantajes”, como si fuera un nuevo señor feudal que sin trabajar, quiere comer y cobrar aranceles a todos los pueblos. Él insiste en que “en el libre comercio global, todos se han aprovechado de la ingenuidad y bondad de los Estados Unidos”. Escondiendo en su discurso que los gobernantes gringos, han robado a todos, A TODOS, los países, a base de guerras y gobiernos títeres de los países víctimas. En palabras pobres, el razonamiento de Trump, equivale a decir que “en un acto de comercio el comprador de un producto, se está aprovechando del comerciante”. ¡Ni un niño de primaria puede aceptar semejante aberración!
Pero su principal adversario, China, la potencia que Tucídides llamaría “la potencia emergente llamada a derrotar” al imperio norteamericano, le ha respondido con todo su poder: que al 145% de aranceles que le impuso Trump, Xi Xinping, le respondió con otro “125% de aranceles recíprocos”. Todo indica que es la derrota de Trump. El brutal y muy merecido nocaut a DJT, es que China no le va a comprar desde ya, ni gas, ni petróleo, ni carbón, etc. Y sobre todo le va a restringir todas las ventas de tierras raras imprescindibles para la industria armamentística y espacial de USA. Y además, muchas otras prohibiciones para no vender en China, a muchas grandes empresas tecnológicas que apoyaron a DJT.
Como se puede ver, Xi Xinping, le pegó donde más le duele a Trump: en el dinero de sus socios políticos. La suspensión de aranceles por 90 días al resto de los países, es el indicio más claro, de que Trump perdió la guerra comercial…, pero se llenó los bolsillos con miles de millones de dólares.