-Auditor transexenal por unanimidad

-Andan buscando a Ariadna

El incremento entre la Ley de Ingresos 2025, por siete mil 111 millones de pesos, y la propuesta para 2026 en la capital del estado, de siete mil 372 millones de pesos, parece leve, marginal, pero obedece a que en el próximo año no se van a pedir los créditos que se autorizaron para el actual, por más de 600 millones de pesos.

Así, si se descuenta la deuda contratada, usada para la construcción de puentes y el equipamiento de la Policía Municipal, los ingresos de 2026 serán un 13.55 por ciento mayores a los del año pasado, este año sin empréstitos previstos.

El alza, de esta manera, representa un importante brinco en la gestión financiera de la capital, muy por encima del índice inflacionario que apunta a cerrar el año en niveles del cuatro por ciento.

En la proyección de los ingresos para el siguiente ejercicio destaca, además, la consolidación de las finanzas del municipio, las cuales tienen un 44.3 por ciento de participación propia, para alcanzar los tres mil 255 millones de pesos, uno de los más altos índices a nivel nacional.

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En terrenos de las finanzas públicas, por cierto, hoy acudirán los secretarios de Hacienda y Gobierno, José de Jesús Granillo y Santiago de la Peña, al Congreso del Estado para entregar el Paquete Económico 2026, dentro del plazo legal para su presentación.

Los legisladores tendrán todo el mes de diciembre para analizarlo, modificarlo y aprobarlo, pero se espera que no tarden más de dos semanas.

Hasta donde sabemos, tanto la propuesta de Ley de Ingresos del Estado como el proyecto de Presupuesto de Egresos mantienen su equilibrio, orden y balance, así como un ligero crecimiento por encima de la inflación, por lo que la administración estatal habrá de superar la meta de los 110 mil millones de pesos de recaudación y gasto del año próximo.

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No hubo sorpresas en la reelección del auditor superior del Estado, Héctor Acosta Félix, salvo por la unanimidad con la que votaron los 31 diputados presentes en la sesión del Congreso de ayer, pocas veces vista en esta legislatura.

Es la tercera vez que el ahora titular de la ASE recibe respaldo amplio en órganos legislativos: en 2015 fue votado por más de dos tercios del Senado de la República para integrar la Comisión Nacional de Hidrocarburos y en 2018 también tuvo unanimidad para comenzar su primer periodo como auditor.

Así, los coordinadores principales, Alfredo Chávez del PAN y Cuauhtémoc Estrada de Morena, plancharon sin problemas el acuerdo al interior de sus bancadas y las demás fuerzas políticas desde hace semanas, por el buen desempeño del transexenal Acosta, cuyo nombre está detrás de prácticamente todos los casos de exfuncionarios acusados de corrupción, tanto del duartismo como del corralato.

El Panel de Selección, encabezado por el director de la Facultad de Derecho, César Gutiérrez, tampoco enfrentó problemas para conducir el proceso ciudadanizado, en el que se apuntaron 10 aspirantes, de los que sólo cinco cumplieron la totalidad de los requisitos y tres pasaron a la terna final, sin cuestionamiento alguno.

Así, sin complicaciones, el auditor obtuvo el pase directo a siete años al frente de la ASE, la que ha sabido conducir sin señalamiento alguno en contra, muy diferente a lo que ocurría hasta 2018.

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Está mayoría abrumadora -que concilió a las fracciones parlamentarias que en pocos asuntos han podido ponerse de acuerdo como en éste- debe ser tomada como una gran área de oportunidad por el reelecto auditor superior del Estado.

No vendría nada mal una revisión de mandos y procedimientos, cuando a nivel federal se está insistiendo mucho en la auditoría en tiempo real, lo cual implicará capacitación e inclusive perfiles adecuados al manejo de tecnologías.

Pero además, la experiencia adquirida a nivel nacional en su momento y haber cumplido un ciclo, permitirá también robustecer el sistema estatal anticorrupción, cuando hay discusión acerca de una cierta duplicidad en sindicaturas y órganos internos de control, con funciones que luego chocan, en tema que sale de la órbita de la ASE pero que tendría que plantearse al menos.

También está una ojeada en serio a pendientes del corralismo, aun en aquellos casos que saliendo de la cancha de la Auditoría Superior del Estado, luego caminan lento y amenazan con quedarse impunes.

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A falta de interlocutores de la 4T que les ayuden a resolver los conflictos por el agua y la inseguridad en las carreteras, los transportistas y agricultores han estado buscando a la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel, muy mencionada, por razones obvias, en los corrillos políticos de Chihuahua, no se diga de Ciudad Juárez.

Por una parte, en la Secretaría de Gobernación las negociaciones empezaron con el pie izquierdo desde que su titular, Rosa Icela Rodríguez, acusara intereses aviesos de la oposición y señalara que algunos dirigentes del movimiento tenían abiertas carpetas de investigación por obstrucción de vías federales y toma de casetas.

A su vez, rechazan al secretario de Agricultura, Julio Berdegué, porque les incumplió con el precio garantía para el maíz blanco y hasta lo han abucheado en las sesiones de la Secretaría de Gobernación.

Carece Sheinbaum de operadores políticos efectivos y tampoco ella se ayuda mucho. Por eso han salido al quite los diputados Ricardo Monreal y Alfonso Ramírez Cuéllar con los foros de análisis sobre la Ley General de Aguas y Ley de Aguas Nacionales.

Por el lado de los manifestantes las cosas no están fáciles, de hecho urgen a un arreglo. El líder de ellos, Heraclio Yako Rodríguez, ha reconocido que hay malestar de los terceros afectados por los bloqueos, además de la natural tensión de quienes protestan.

Fue efectiva, como medida de presión, la alianza entre transportistas y agricultores, pero tal vez sea hora que empiecen a buscar soluciones parciales y progresivas. Comerse el elefante en pedazos, como se dice.

Por eso es que el miércoles, justo cuando Ariadna comparecía y argumentaba a favor de los números del Bienestar, un grupo de productores ingresaron a la sesión e intentaron acercársele en la sesión pero se lo impidieron.

Ahí tiene un buen reto, por un lado disciplinarse con su jefa inmediata, y por el otro un balón para la portería de Chihuahua.